Una genialidad que espanta fantasmas
CONTRACRÓNICA | El Granada, que sigue sin mostrar su mejor nivel, logró la segunda jornada consecutiva sumando gracias al golazo de Montoro
Una obra de arte de Montoro evitó que el Granada cosechase su quinta derrota de la temporada en Pamplona. Fue un punto sumado en el último minuto con sabor a victoria, pero que, para muchos aficionados, no tapó el hecho de que Osasuna pudo abrir brecha en el marcador durante la segunda mitad. Para los visitantes, el empate fue más que justo. Un premio al esfuerzo realizado. Para los locales, todo lo contrario.
Entre es imposibilidad por ponerse de acuerdo, una realidad sí parece clara. A este Granada le falta mucho para encontrar el nivel que mostró en temporadas anteriores. Pero, existe otra verdad. Y es que el equipo no es el mismo. Tampoco su idea de juego. En partidos como el del pasado viernes en ‘El Sadar’ se acentuaron las ausencias de hombres como Yangel Herrera o Roberto Soldado.
Celebrar una segunda victoria consecutiva no iba a ser nada fácil, algo que se previa antes de comenzar el encuentro. Osasuna llegaba en alza y con la posibilidad de dormir colíder. A ello había que sumar un ambiente hostil, ya que hubo llenazo en ‘El Sadar’. Una atmósfera que, incluso, destacó Robert Moreno en rueda de prensa.
Para contrarrestar las fortalezas de Osasuna, el técnico granadinista cambió su sistema habitual. Con un 4-4-2 salió al césped del feudo pamplonica, colocando a Luis Suárez y Bacca arriba. El ex de Sevilla y Villarreal fue una de las dos novedades con respecto al último duelo, junto a la de Darwin Machís, que sustituyó a Soro en la banda. Por lo demás, repitió en defensa y siguió optando por Víctor Díaz y Luis Abram como pareja de centrales.
El guion del encuentro no estaba saliendo nada mal para el Granada. Sí concedió oportunidades claras, pero también gozó de ellas. Machís no pudo aprovechar un mano a mano ante Sergio Herrera en lo que fue el primer aviso nazarí. En la otra área, con el cuadro rojiblanco cerrando bien por dentro, Osasuna basó su peligro por los costados. Un eléctrico Chimy Ávila aparecía tanto para centrar como para rematar y supuso un quebradero de cabeza.
La sensación de, aunque sufriendo, tener el ritmo controlado se diluyó con la lesión de Max Gonalons. El centrocampista galo es capital en este equipo y volvió a demostrarse una vez más, a pesar de que su compañero en la medular era Luis Milla. Pero, el madrileño no puede abarcar todo el campo. La mala noticia de la salida del francés vino acompañada del gol del Chimy justo antes del descanso.
El Granada salió azotado psicológicamente por ese tanto tras la reanudación y, tal y como dijo Jagoba Arrasate en la posterior rueda de prensa, el 2-0 se antojaba más factible que un hipotético empate. No fueron pocos los "uy" que se escucharon en 'El Sadar'.
Acabaría siendo en una galopada de uno de los hombres que apenas estaban apareciendo, Luis Suárez, cuando llegó la jugada que marcaría la recta final. Cote, incapaz de alcanzar al colombiano en su carrera hacia el gol, asumió que la única forma de pararle iba a ser con falta y expulsión. Al Granada le iba a restar un cuarto de hora para intentar el empate en superioridad numérica.
Sin embargo, pese a esa ventaja, todo parecía destinado al triunfo rojillo. Los futbolistas de Robert Moreno tampoco pudieron inquietar la portería osasunista y sus recursos en ataque eran estériles. Tuvo que aparecer Montoro, desde más de cuarenta metros, para aceptar el reto que Sergio Herrera llevaba proponiendo desde el inicio.
Montoro sacó a relucir el espíritu de eterna lucha del que tanto hizo gala el Granada en tiempos muy recientes. En esta ocasión, la suerte de los últimos minutos sonrió al equipo nazarí, tan lastrado durante esas fases de los partidos a lo largo del inicio liguero. Para hacerlo bueno, no queda otra que brindar un triunfo a la afición el jueves en el ‘Nuevo Los Cármenes’ frente al Getafe en una nueva final que vivirá el coliseo del Zaidín.
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Los rojiblancos, que se adelantaron pronto en el marcador con un gol olímpico de Gumbau, realizaron un gran partido ante el Athletic Club
