Una noche mágica que impulsa al Granada
El equipo de Diego Martínez ahuyentó los últimos resultados en liga con otra épica exhibición para el recuerdo
Por increíble que parezca, había gente a la que le comenzaban a surgir ciertas dudas en cuanto al futuro desarrollo del Granada en la presente temporada. Sí, a ese equipo que en dos años y medio ha pasado de jugar en Segunda División a hacerlo por el continente. Cuatro victorias, tres empates y cinco derrotas entre liga y Copa a lo largo de este 2021 eran un balance algo negativo para los más exigentes, los mismos que durante el verano vaticinaban que la presencia del club en Europa League podía convertirse en otro caso Betis o Espanyol. No contaron con que Diego ya tenía un plan.
El Barcelona bajó de la nube copera al conjunto rojiblanco de la forma más cruel, futbolísticamente hablando, posible. Un palo anímico tremendo para cualquier ser humano de a pie. No para el Granada, que se repuso con una muestra de superación total tres días después en el estadio del Levante. Frente al líder se intentó, pero la suerte corrió de lado colchonero. Sin embargo, en el momento más histórico que se ha podido vivir, hasta el momento, en 90 años, alcanzó el Cum laude. Quizás a cosas como la de ayer se refería el técnico gallego cuando dijo el día de su homenaje en la `Puerta de los entrenadores´ eso de que “lo mejor está por llegar”.
Dos planteles con numerosas bajas. La ilusión frente a la obligación. Pesó más la primera, y de ese lado cayó la balanza cuando aún no se había cumplido el ecuador del primer tiempo. El trivote Gonalons – Montoro – Yangel es una bendición para el Granada, y es que juega con otra cara cada vez que en su medular se leen esos nombres. La labor del galo, encomiable durante lo que aguantó sobre el césped hasta que pidió el cambio en el segundo tiempo. Montoro se erige aún más como director de orquesta cuando Max le cubre las espaldas, mientras que Yangel Herrera nunca decepciona. Otro cabezazo más, y esta vez para los anales rojiblancos.
Además, en la banda ha emergido una súper estrella. Kenedy jugó como si del patio de su casa se tratara. No es el primer partido que su desborde resulta clave, pero ayer lo hizo casi todo bien. La aerolínea en los costados se completó con Machís, algo tapado por el partidazo de su compañero, aunque no por ello fue menos importante.
También volvió a aparecer sobre la lona del `Nuevo Los Cármenes´ un factor del que tanto presumía el club estas dos últimas temporadas. Una defensa que no dejó ningún espacio a los atacantes partenopeos. Los centrales, de diez, con un Germán que tuvo que verse obligado a forzar ante la lesión de Vallejo. Foulquier suplió sus carencias defensivas con tremendo ímpetu, y Neva es, sencillamente, incansable. Todos ellos provocaron que Rui Silva se convirtiera en mero espectador.
Y, arriba, un hombre con 38 tacos. Bien podrían ser 23 para cualquiera que no le conozca, como el dorsal que representa con la elástica rojiblanca horizontal, la cual ha defendido desde el primer momento como si se hubiera formado en las categorías inferiores. Un taconazo que pudo ser el tercero, y una galopada que ya forma parte del recuerdo. Esa imagen de Jorge Molina corriendo detrás de la pelota en el minuto 93 en el área rival representó a todo el granadinismo. A los presentes en el estadio no nos quedó otra que aplaudir en pie.
Pocas pegas se pudieron sacar de una noche brillante. La lesión de Vallejo, que a duras penas celebró el segundo tanto, fue sin duda la nota más negativa del choque. Y, antes del mismo, un hecho lamentable a la llegada del autobús del Nápoles al estadio. La expedición italiana fue recibida a insultos por parte de un pequeño número de “aficionados” que se congregaron en la calle Pintor Maldonado. La mayor parte ni mucho menos actuó de esa forma, pero, desgraciadamente, los cuatro cafres de turno siempre hacen más ruido que el sector ejemplar.
El 18 de febrero de 2021 es una fecha que ya está escrita con letras de oro en la ciudad de la Alhambra. Un paso de gigante hacia el que, en una semana, puede resultar el mayor logro de la historia del club. En el `Diego Armando Maradona´. Seis días restan, aunque a muchos se les harán eternos. Para matar el gusanillo, el domingo toca volver a ponerse las botas. La filosofía de Diego Martínez ha llevado al Granada hasta aquí. No se va a perder ahora, por lo que toca pensar única y exclusivamente en el presente, Huesca. Y, el jueves que viene, ser leyenda.
@Francalvo1996
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Los rojiblancos, que se adelantaron pronto en el marcador con un gol olímpico de Gumbau, realizaron un gran partido ante el Athletic Club
