Patricia Rodríguez se reunió hasta altas horas de la madrugada y se prevé una limpia
La dirección deportiva encabezada por Pep Boada podría tener las horas contadas
La afición esperó al término del encuentro ante el Espanyol la salida de los futbolistas en la calle Pintor Maldonado, aunque el foco estaba centrado en una persona en concreto: Patricia Rodríguez. Sin embargo, ninguno pudo ver a la directora general abandonar las instalaciones, ya que se mantuvo reunida en las oficinas hasta altas horas de la madrugada en busca de soluciones que, por el poco tiempo transcurrido desde la consumación del descenso, pudieron decidirse en caliente.
Los reproches hacia la guipuzcoana fueron una constante por parte de los aficionados que aguardaban a verla, con la esperanza de escuchar explicaciones. Ella, tras el pitido final, estuvo unos cinco minutos sentada en su asiento del palco, con la mirada perdida. Transcurrido ese tiempo, se dirigió al interior del antepalco y no se le volvió a ver en toda la noche.
Los jugadores fueron los primeros en marcharse del estadio, muchos de ellos entre pitos, aunque otros, como Jorge Molina o Luís Maximiano, se llevaron calurosas ovaciones. Cuando la muchedumbre se cansó de esperar y pusieron cada uno rumbo a sus domicilios, salieron en sus vehículos la consejera Sophia Yang e, instantes después, el director deportivo Pep Boada, expresando un “lo siento, eh” a los medios de comunicación presentes todavía en los aledaños del parking.
Mientras tanto, con las luces del ‘Nuevo Los Cármenes’ apagadas casi en su totalidad, Patricia Rodríguez estaba reunida con Francisco Jiménez Moya, director del área de Gestión, y dos abogados del club. El fin de ese encuentro era comenzar a planificar ya la próxima temporada, en la que se prevén nuevos cambios. La dirección deportiva encabezada por Pep Boada fue uno de los puntos calientes de las conversaciones y podría tener las horas contadas en Granada.
De momento, no se ha notificado ninguna comparecencia de prensa o encuentro para argumentar lo ocurrido y presentar un proyecto de cara al siguiente curso. Desde que la propiedad china se adueñó del Granada, se ha consumado el segundo descenso en cinco años, y la entidad ha tocado fondo después de vivirse la mejor etapa en su historia.
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