Derrota, pero a mucha honra, 1-4
CRÓNICA | Un Granada batallador sucumbe ante el Real Madrid, pese a protagonizar muy buenos minutos y no perder nunca la cara al partido
El Granada ni ganó ni puntuó ante el Real Madrid en ‘Los Cármenes’, pero dio la cara y, ni con un hombre menos mediada la segunda mitad por una incrédula expulsión de Monchu, bajó los brazos. Quizás ese hecho de demostrar que podía guerrear, pese al 1-3 que por entonces ya se reflejaba en el marcador, fue el detonante para aportar el granito de arena muchas veces habitual a los equipos denominados “grandes”. A diferencia de anteriores ocasiones, la goleada merengue no evitó que el coliseo del Zaidín ovacionara a los suyos, valorando el esfuerzo derramado durante los 90 minutos.
La palabra “imposible” no iba a existir durante la tarde del domingo, ni para el equipo de Robert Moreno, ni para los miles de granadinistas que llenaron las gradas del ‘Nuevo Los Cármenes’. Al Real Madrid no se le ganaba desde 2013, pero el conjunto rojiblanco ya había demostrado esta temporada, pese a las dudas iniciales, que podía competir ante cualquier rival, como ya hizo frente a Barcelona o Sevilla.
Dos modificaciones hizo el técnico catalán con respecto al último partido, donde cayó en casa del Espanyol, pero dando muy buena imagen. Montoro y Jorge Molina se quedaron en el banquillo y Gonalons, recuperado de su lesión, y Antonio Puertas los suplieron. Unas variaciones que provocaron, además, cambio en el sistema, pasando del habitual 4-4-2 a un 4-2-3-1, con Rochina de mediapunta por delante del doble pivote.
Por tanto, el once rojiblanco quedó conformado por Luís Maximiano en portería; Quini, Víctor Díaz, Germán y Neva atrás; Monchu y Gonalons en el centro del campo, con Rochina más adelantado; Puertas y Soro por los costados; y Luis Suárez arriba.
En el bando contrario, Carlo Ancelotti no dio lugar a sorpresas, más allá de la inclusión de Nacho en el centro de la zaga en lugar de Militao. Courtois se colocó bajo los tres palos; Carvajal, Nacho, Alaba y Mendy en línea de cuatro; Casemiro, Modric y Kroos formando el tridente ya conocido en la medular; Asensio y Vinícius en las bandas; y, en punta, el insustituible Benzema.
El encuentro comenzó con dos sustos en ambas áreas. Primero, Luís Maximiano puso los corazones rojiblancos en un puño aguantando hasta el final la presión de Karim Benzema cuando tenía la pelota en sus pies. Seguidamente, en el otro lado del campo, Suárez abrió para Soro y este puso un centro peligrosísimo que cortó providencial Alaba. Vinícius también probó fortuna desde lejos del área, pero Maximiano estuvo bien colocado para blocar la pelota.
Fue antes de alcanzar los veinte minutos de partido cuando el Real Madrid hizo gala de lo peligroso que puede ser con espacios. Un balón al hueco, tras error de Puertas, lo condujo Marco Asensio hasta el área de Maximiano y definió ajustado ante el guardameta luso, que llegó a tocar el esférico, pero sin la fuerza suficiente para desviarlo.
No tardó en abrir la brecha el cuadro de Ancelotti, apenas cinco minutos. Lo que tardó en coger dormida a la defensa nazarí en un saque de esquina. Kroos botó en corto para Modric, que volvió a conectar con el alemán y éste centró raso para que Nacho, en el primer palo, metiera la puntera y remachara a las mallas rojiblancas. Tuvo todo el tiempo del mundo el equipo merengue en esa acción, gozando de espacios por doquier.
Pese a la dura derrota que estaba sufriendo momentáneamente, el Granada no bajó los brazos y siguió intentando acechar el área. Ese atrevimiento a punto estuvo de costarle el tercero, en un contragolpe que definió Asensio por encima de Luís Maximiano y obligó a Soro a emplearse a fondo para sacar el esférico en la misma línea de gol. Del posible 0-3 al 1-2 y un atisbo de esperanza. Vinícius perdió el balón en tres cuartos de campo, le acabó llegando a los pies de Luis Suárez y el colombiano no se lo pensó desde fuera del área. Su disparo tocó lo justo en Nacho para que Courtois se venciera al otro lado y no pudiera reaccionar a tiempo.
El tanto del colombiano dio alas a un Granada que se lo creyó y jugó sus mejores minutos del envite antes del enfilar el paso a vestuarios. Quini casi hizo el empate al cazar un rechace de Courtois, pero su derechazo se estrelló contra el lateral de la red. También hubo tiempo para el milagro de cada partido de Luís Maximiano, con una mano espectacular a disparo de Benzema. El descanso le vino mucho mejor al Real Madrid que al conjunto rojiblanco, y es que los blancos estaban sufriendo, y mucho, sobre el verde ante la reacción pletórica de los hombres de Robert Moreno.
Tras la reanudación, Montoro fue el primer cambio de los locales al sustituir a Puertas, una circunstancia que desplazó a Rochina a la banda. La segunda mitad fue un correcalles desde el principio. En una de esas idas y venidas, a los diez minutos de reanudarse el partido, Víctor Díaz se rompió y no pudo seguir la carrera de Benzema. El francés tocó para Modric, el croata se la regaló a Vinícius y el brasileño no perdonó a puerta vacía.
La respuesta desde el banquillo local fue instantánea y Robert Moreno dio entrada a dos canteranos, Torrente e Isma Ruiz, y a Jorge Molina por el malparado Víctor Díaz, Gonalons y Rochina. Luis Suárez pudo acortar distancias acto seguido con un derechazo desde el vértice del área que se fue por encima del larguero. Se llenó de balón el cafetero en esa acción.
El Granada ya había demostrado que era capaz de competir con dos goles de desventaja en el electrónico. Pero, Martínez Munuera dio paso a un show completamente innecesario dadas las circunstancias. Una entrada a destiempo de Monchu sobre Vinícius, que nunca debe ser más de amarilla, fue suficiente para que el árbitro valenciano le mostrase la roja directa ante la incredulidad de los asistentes. Uno de los sorprendidos fue Robert Moreno, cuyas protestas le costaron también la expulsión.
La misión se convirtió en imposible con un hombre menos y el Real Madrid campó a sus anchas durante los veinte minutos que restaban al duelo. Mendy hizo el cuarto al definir cruzado un mano a mano contra Maximiano. Sentenciada la contienda, Ancelotti tuvo el detalle con Jesús Vallejo de darle entrada en los instantes finales para que el central maño se llevara la ovación de la que fue su casa a lo largo de la última temporada y media.
También hubo aplausos para los rojiblancos. La parroquia nazarí premió el esfuerzo de los suyos, bien sabedora de que poco más pudo hacer para plantarle cara al Real Madrid y que demasiado excesivo fue el castigo. Hasta Molina pudo maquillar el resultado, pero Courtois metió una espléndida mano en el cabezazo del alcoyano. Se vuelve a coquetear seriamente con la zona de descenso (de no ser por la victoria del Betis sobre el Elche, el Granada habría terminado la jornada en esos puestos), aunque la imagen mostrada estas últimas semanas debe ser el aliento e impuso de los rojiblancos.
GRANADA CF Luís Maximiano; Quini, Víctor Díaz (Raúl Torrente, 58´), Germán Sánchez, Carlos Neva; Monchu, Gonalons (Isma Ruiz, 58´); Antonio Puertas (Montoro, 46´), Rubén Rochina (Jorge Molina, 58´), Soro; y Luis Suárez.
REAL MADRID Courtois; Carvajal, Nacho, Alaba (Jesús Vallejo, 83´), Mendy; Casemiro, Modric (Camavinga, 80´), Kroos (Isco, 80´); Asensio, Vinícius Jr. (Rodrygo, 72´) y Benzema (Jovic, 80´).
GOLES 0-1 Asensio (min. 19); 0-2 Nacho (min. 25); 1-2 Luis Suárez (min. 34); 1-3 Vinícius Jr. (min. 56); 1-3 Mendy (min. 76).
ÁRBITRO Martínez Munuera, Juan (Comité valenciano). Amonestó al local Montoro, y al visitante Isco. Expulsó con tarjeta roja directa al granadinista Monchu en el minuto 68 y al entrenador Robert Moreno en el minuto 69.
INCIDENCIAS Partido correspondiente a la décimo cuarta jornada de LaLiga Santander disputado en el Estadio Municipal ‘Nuevo Los Cármenes’ (Granada) ante 17.460 espectadores.
@Francalvo1996
francalvo@granadaenjuego.com
El entrenador del Athletic Club guarda mucho respeto al Granada por "su situación"
Los asistentes intercambiaron detalles e incluso soplaron juntos las velas de la tarta de cumpleaños
