Tres puntos que acercan la permanencia, 0-1
El Granada consigue un triunfo vital en la lucha por la permanencia, tres puntos que dejan a un rival directo como el Racing de Santander a nueve puntos
El Granada CF dio un paso de gigante de cara a la permanencia tras una victoria por la mínima en El Sardinero. Un gol de Siqueira, tras penalti cometido sobre Ike Uche, fue suficiente para derrotar a un rácano Rácing, inferior en todo momento a un Granada inteligente, que jugó con el marcador como y cuando quiso.
Abel Resino recuperó el tradicional y efectivo 4-2-3-1, aparcando las probaturas del partido del Sevilla. Moisés Hurtado recuperó su lugar en el centro del campo y Henrique volvió a la suplencia. La gran sorpresa en el once, aunque se barruntó durante la semana, fue la inclusión de Odion Ighalo en el once, dando un merecido banquillazo a Franco Jara.
Mientras, el Rácing de Álvaro Cervera salió con todo. Adrián, Stuani y Babacar formaban el tridente ofensivo de los santanderinos. Curiosamente, el senegalés debutaba como titular contra el que pudo ser su equipo en invierno, dejando en el banco al siempre bullicioso Arana.
El Granada CF se aprovechó de los nervios iniciales de los locales para salir mandando desde el primer minuto. La circulación de balón de los rojiblancos era infinitamente más precisa que la de los cántabros, y este hecho se convirtió pronto en llegadas al área.
Un centro pasado de Benítez desde la izquierda lo devolvió Uche al área, donde Ighalo no pudo rematar de espaldas en el interior del área chica. La defensa granadinista cortaba cualquier intento de avance del Rácing, y Mikel Rico y Moisés se hacían fuertes en la medular, dando rápida salida al juego rojiblanco cuando recuperaban un balón.
Fruto de uno de estos robos, Abel Gómez filtró un pase de maestro entre la defensa cántabra, Ighalo salvó la salida de Mario y disparó escorado, pero el poste de la portería racinguista no quiso hacer justicia a la gran jugada de ataque del Granada y repelió el disparo de los rojiblancos. Minutos después, en una acción similar, de nuevo Ighalo empalmó un nuevo envío de Abel desde la frontal, pero Mario respondió con una gran parada.
El Granada vivía sus mejores momentos y Abel Gómez probó nuevamente los guantes de Mario con un lejano disparo al cual el guardameta cántabro respondió con una nueva parada. Los rojiblancos revivían sensaciones pasadas, donde su superioridad en el juego no se traducía en goles en el marcador. El Rácing se desperezó con un pase en profundidad a Babacar al que llegó antes Roberto, y con un posterior remate de cabeza del siempre peligroso Stuani, que puso el corazón en un puño a todos los rojiblancos. Por suerte, el balón salió por encima del larguero ante la estirada inútil de Roberto.
La primera mitad murió con un disparo de falta de Dani Benítez, al que Mario respondió con más adorno del que requería la acción. A los puntos, el Granada había sido infinitamente mejor que un Rácing impreciso y asustado frente a la responsabilidad que implicaba el partido. Pese a todo, el empate mantenía la incertidumbre en el marcador.
El Granada CF salió de vestuarios recibiendo un claro mensaje conservador. El empate era bueno. La responsabilidad de ganar el partido era de los cántabros.
El partido sucumbió ante la poco atractiva oferta futbolística de ambos equipos. Los rojiblancos se sentían superiores, pero tenían claro que si el Rácing no marcaba, acabaría entrando en una fase final de nervios que le podrían costar el partido. Abel Resino pronto rectificó por su apuesta inicial y dio entrada a Franco Jara en la derecha en lugar de Ighalo. Cortés no ofrece las mismas prestaciones que Nyom, y la banda derecha había estado desaprovechada durante todo el partido.
Uche dispuso la primera ocasión rojiblanca de esta segunda parte, cuando se coló entre la defensa local e intento superar a Mario con una vaselina, aunque el guardameta detuvo el balón con la cara, evitando el tanto.
El Rácing se decidió por adelantar líneas a falta de 20 minutos, aunque sólo fue capaz de inquietar levemente a Roberto a balón parado. En vista de que el partido iba camino de las tablas, Álvaro Cervera se jugó el todo por el todo, retirando a Diop del centro del campo e introduciendo un nuevo delantero. Fue el mejor regalo para el Granada. Justo el que esperaba Abel.
Sin el senegalés en el centro del campo racinguista para superar físicamente Abel, el de Monachil, cansado de tanta brega pero sobrado de clase en sus botas, tuvo la sangre fría de enviar un balón a Uche para que encarara a Mario, y justo antes de su remate fue derribado por Bernardo. Guilhe Siqueira, infalible, acertó con la pena máxima al borde del minuto noventa.
Los seis minutos que agregó Ayza Gómez se le hicieron largos al Granada, especialmente tras un error de Cortés en el que el árbitro ayudó señalando falta del delantero.
La inteligencia del Granada había dado su fruto. El partido siguió justo el guión que había imaginado Abel Resino, cruel para el Rácing, aunque justo con el Granada, que en el cómputo general había sido mejor que su rival.
El Granada CF ve la permanencia más cerca que nunca. Sus 34 puntos hacen que mire a seis al sorprendente Zaragoza, que ha reaccionado en las últimas semanas, aunque Rácing y Sporting se alejan ya a nueve puntos.
RACING SANTANDER: Toño; Álvaro, Torrejón, Bernardo, Cisma; Diop (Javi Martínez, min 83), Colsa, Edu Bedia, Adrián (Munitis, min 68); Babacar (Arana, min 46)y Stuani.
GRANADA CF: Roberto; Cortes, Íñigo López, Mainz, Siqueira; Abel Gómez (Lucena, min 90), Mikel Rico; Ighalo (Franco Jara, min 57), Moises, Dani Benítez (Jaime, min 86); y Uche.
GOL: 0-1, min 88. Siqueira, de penalti.
ÁRBITRO: Miguel Ángel Ayza Gámez (comité valenciano). Mostró cartulina amarilla a Colsa, Bernardo, Mario Fernández y Cisma por el Racing, y a Mainz y Roberto por el Granada.
INCIDENCIAS: partido de la trigésima primera jornada de la Liga de Primera División disputado en los Campos de Sport de El Sardinero ante 15.960 espectadores.
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