El Covirán vive un final cruel tras jugar un gran partido, 79-84

CRÓNICA | El equipo rojinegro somete al Real Madrid durante casi 38 minutos, pero se queda sin fuerzas en el tramo decisivo

Julio Piñero/ GRANADA  |  8 de enero de 2025
Amine Noua defendido por Mario Hezonja (JOSE VELASCO)
Amine Noua defendido por Mario Hezonja (JOSE VELASCO)

El Covirán Granada se quedó muy cerca de firmar una proeza. Perdió tras realizar un gran partido, en el que fue por delante en el marcador durante casi 38 minutos, pero las fuerzas le fallaron en el tramo final, donde vio cómo el Real Madrid le dio la vuelta para imponerse finalmente por 79-84. Pese a todo, el público reconoció el gran esfuerzo de su equipo, que fue capaz de poner contras las cuerdas a un rival de mucho potencial. Jugó a muy buen nivel el conjunto rojinegro durante casi todo el encuentro. Defendió con una gran intensidad, para provocar errores en su rival y estuvo muy acertado en sus acciones de ataque, pero ese gran esfuerzo y buen juego no tuvo premio final.

Esta vez estuvieron de inicio Clavell y Rubén Guerrero en detrimento de Agustín Ubal y Willey. Encestó primero el equipo granadino por medio de Noua, Clavell y Rousselle, lo que concedió un sorprendente 7-0. El equipo blanco estuvo errático en los primeros compases. Con 11-2 tuvo que solicitar su primer tiempo muerto Chus Mateo para intentar espabilar de alguna manera a los suyos. Noua estuvo muy inspirado y anotó con facilidad desde cerca y media distancia para poner el 15-5. Llegaron las primeras rotaciones para intentar mantener el ritmo de juego del principio. Willey entró muy despistado y fallón, cometió una personal y decidió sentarlo rápidamente Pablo Pin para dar cabida a Iván Aurrecoechea. El Real Madrid logró reducir algo la distancia en el marcador con la entrada de Llull. El primer cuarto acabó con 25-18.

Encestaron Aurrecoechea y Ubal para poner el 29-18 en el comienzo del segundo periodo. Era la máxima ventaja hasta ese momento. Los visitantes se sentían muy incómodos a la hora de atacar ante la intensidad defensiva del Covirán. Ubal encestó dos tiros libres tras una falta antideportiva de Llull y puso el 33-21. El técnico granadino paró el partido con el 33-26 para transmitir indicaciones a sus jugadores, que necesitaban seguir trabajando al máximo para mantener esa distancia. Hubo una fuerte lucha por el rebote y Rousselle se mostró muy acertado durante algunos minutos para sostener esa ventaja. Con 40-28 tuvo que pedir otro tiempo muerto Chus Mateo. Noua y Rousselle anotaron de tres y con 48-38 se alcanzó el descanso. Pudo ser mayor la renta, pero no le concedieron a Clavell una canasta sobre la bocina, al considerar los colegiados que estaba fuera de tiempo.

 

Noua anotó en una penetración y eso llevó al 50-38 en los primeros minutos del penúltimo cuarto. Encestó después Clavell para elevar la distancia al 52-38. La incrementó Guerrero con un punto más (53-38), aunque aún faltaba mucho por jugar. El Covirán estaba un poco cargado de personales a esas alturas. Willey, Guerrero y Clavell estaban con tres. Ibaka empezaba a hacer daño desde la pintura para meter a su equipo en el partido. El Real Madrid no parecía dispuesto a rendirse. Sabía que tenía que apretar en esa fase para llegar con opciones de llevarse al final el triunfo, pese a que no estaba jugando a su nivel habitual. Pablo Pin debía dosificar los esfuerzos de sus jugadores para aguantar el fuerte ritmo. Hezonja sostuvo al equipo blanco en sus acciones de ataque y eso redujo un poco la renta para llegar al término de ese periodo con 64-56.

Con 64-59 decidió pedir un tiempo muerto Pablo Pin. Hezonja seguía haciendo daño al penetrar con alguna facilidad en la zona y era necesario frenarlo de alguna manera. Llegó el 64-62 con una canasta de tres de Ibaka. Vinieron otros buenos momentos del Covirán para irse al 68-62 y eso hizo que Chus Mateo pidiera un tiempo muerto a siete minutos del final. Willey cometió su cuarta personal ante las protestas del público al interpretar que taponó el balón. Bamforth anotó un triple para llevar al 73-68. Anotó de tres Campazzo para apretar al máximo el marcador (75-75) a falta de tres minutos. El base argentino se echó a su equipo a la espalda para poner el 75-77. Era la primera vez que el Real Madrid se veía por delante en el partido. Hezonja incrementó la desventaja (77-82). El esfuerzo no encontró recompensa y llegó una derrota injusta.

 

 
Jonathan Rousselle penetra ante Facu Campazzo (JOSÉ VELASCO)
Jonathan Rousselle penetra ante Facu Campazzo (JOSÉ VELASCO)

Ficha técnica

COVIRÁN GRANADA: Rousselle 11, Clavell 6, Valtonen 6, Noua 18 y Guerrero 1 (quinteto inicial), Vicedo 3, Ubal 6, Bamforth 15, Sergi García 0, Willey 11 y Aurrecoechea 2.

REAL MADRID: Campazzo 15, Rathan-Mayes 0, Musa 5, Ndiaye 6 y Tavares 7 (quinteto inicial), Sergio Llull 3, Abalde 3, Hezonja 23, Ibaka 7, Andrés Feliz 5, Garuba 4 y Hugo González 6.

PARCIALES: 25-18, 23-20 (48-38, descanso), 16-18 y 15-28.

ÁRBITROS: Carlos Peruga, Alberto Baena y Fabio Fernández. Sin eliminados por faltas personales.

INCIDENCIAS: Partido de la decimocuarta jornada de la Liga Endesa disputado en el Palacio de Deportes ante 7.969 espectadores.

 
 
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