España encuentra la luz del triunfo en el túnel georgiano (1-4). La Selección Sub-19 supera la fuerte presión de los anfitriones para obtener tres puntos vitales en la primera jornada de la Ronda Élite Mejor debut imposible para el defensor granadino, Antonio Marín Molina, con 90 minutos disputados y capitán de la Selección Española Sub-19 en el debut con goleada ante la anfitriona Georgia (1-4). La fuerza está en la Unidad reza el lema del himno georgiano, que los jugadores de la Selección han podido escuchar en los compases previos a su estreno en el minitorneo Ronda Élite clasificatorio para el Campeonato de Europa de la categoría.

Como si fuese una premonición, los jóvenes internacionales españoles han debido de afrontar un durísimo test ante el conjuntado bloque caucásico que ha llevado el peligro a la portería de Sivera casi desde el inicio con un peligroso tiro libre durante las primeras escaramuzas del encuentro.

El Seleccionador, Luis de la Fuente, había hecho hincapié en los arreones iniciales georgianos como factor de riesgo y a fe que lo ha sido. Afortunadamente España se reponía pronto del embate inicial, silenciando la animosa grada del estadio Mikheil Meskhi al cuarto de hora con un lanzamiento parabólico de Marco Asensio que se colaba en la portería local tras rebotar en un defensa.

Georgia acusaba un golpe que le torcía los planes haciendo buena la máxima pugilística acerca de que todos tenemos uno hasta recibir el primer gancho. A éste se le sumaba un segundo obra de Jesús Vallejo, providencial en su llegada para remachar un servicio desde banda izquierda.

Aunque el segundo tanto lejos de refrenar la garra local, espoleó una reacción a base de velocidad y rápidas combinaciones con premio para los caucásicos al borde del descanso gracias a un gol de Tevzadze, quien batía por bajo a Sivera después de una fulgurante internada.

La presión se cernía sobre los Sub-19 en la segunda parte con manos providenciales del guardameta español a remate de Kharaishvili y un corte milagroso de Vallejo a disparo de Beridze.

A partir de ese momento De la Fuente optaba mover el banquillo y apuntalar así el sufrido triunfo que la eficacia de Borja Mayoral acababa por certificar con su tanto en el tramo final del encuentro a la que siguió otra inconmensurable intervención de Sivera a bocajarro y un nuevo tanto de Alfonso Pedraza para cerrar el electrónico.

Victoria crucial a la postre tras la goleada portuguesa por 6-1 a Turquía en el otro encuentro de la primera jornada. Si los antiguos romanos llamaron a esta zona Iberia, igual que nuestra Penísula, todo apunta a que lusos y españoles se enfrentarán -con permiso de lo que suceda durante la segunda jornada en un definitivo derbi ibérico el próximo miércoles por dilucidar quién de los dos se clasificará para la fase final del Europeo.