ONCE INICIAL
No hay más cera que la que arde
El Granada CF deambula penúltimo en la clasificación, con cada vez menos opciones de salvación, y todo tras otro horripilante partido en Gijón. Es lo que hay, es una realidad.
¿Por qué nos encontramos en esta situación?. Bueno, enumerar los problemas no tiene sentido por tantas veces repetido, que si un propietario chino que parece no sabe de esto, que si un señor apellidado Vieta que parece sabe de fútbol, pero no de cómo llevar un club de fútbol, que si un señor de apellido Guardiola que parece asesor externo de la presidencia y con mando en la confección de la plantilla que tampoco sabe de esto, que si un señor apodado Pirú que demostró en Granada su inexperiencia y falta de conocimientos para liquidar/construir una plantilla de fútbol, y que si un señor llamado Jémez, o que le engañaron o que él engaño a la ciudad de Granada, porque peor no pudo ayudar a liquidar/construir una plantilla de fútbol.
¿Y qué pasó?. Pues lo lógico, que desde el primer momento se vio que la plantilla no era competitiva, y que muchos de los jugadores nuevos no mejoraban a los cedidos/echados.
¿Y cómo se trató de solucionar?. Pues con el cese del señor Jémez, que vaya legado dejó, y con el fichaje de Lucas Alcaraz, junto con un nuevo y ajetreado mercado de invierno que trajo bastantes nuevos jugadores, y abrió la puerta a otros tantos, prueba del nefasto trabajo realizado por el dúo Piru/Jémez en la confección de la plantilla en verano.
¿Y se pudo solucionar?. Pues no, la verdad. A pesar de una serie de victorias como locales, el equipo fuera de casa sigue siendo un horror, y sigue fallando clamorosa y tristemente en los partidos claves. Alguno de los fichajes de invierno como Wakaso, Ramos o Héctor si han funcionado, otros no, y evidentemente Lucas tampoco ha acertado.
Y ahora, ¿dónde estamos?. Aún siendo muy del Granada CF y todavía esperando un milagro, si se mira objetivamente, el equipo tiene más de pie y medio en la segunda división, demostrando ser un equipo que no es tal, mal estructurado, carente de carácter y sin implicación. Un poema¡.
¿Y qué se puede hacer?. Pues competir con dignidad lo que resta, lo que no siempre ha hecho, empezar a planificar la temporada que viene en Segunda División, contratar a gente competente que construya una plantilla con pies y cabeza pensando más en jugadores nacionales, olvidarse de apuestas sin sentido tipo Guardiola o Pirú, y cesar a Lucas para que venga otro entrenador.
¿Es Lucas culpable de la situación?. Ni mucho menos es el mayor culpable, pero después de tanto tiempo al frente del equipo es evidente que tiene una alta responsabilidad. No ha sabido ni motivar a la plantilla ni planificar ciertos partidos (en Gijón, con jugadores elegidos para un juego directo, poner a Boga de 9 ), y no creo que sea el técnico milagro que necesita el equipo para estas últimas jornadas, ni creo que sea el técnico idóneo para la segunda división.
Y todo esto, tras otro bochorno en Gijón, después del bochorno en Leganés, ante dos plantillas ni mucho menos superiores a la nuestra, con gol de un ex, lógicamente. Sería el primero en alegrarme, pero a día de hoy ya pienso en la temporada próxima con mi equipo en segunda.
Y a todo esto los chicos del basket nos dieron un disgusto por su abultada derrota ante el rival sevillano, derrota que no entraba en los planes, y menos con la claridad que se produjo. Tropezón importante en su objetivo de ser campeones de la categoría. La única alegría la dio el filial, ganando su partido ante un rival, el Jaén, que a pesar de los innumerables problemas que está atravesando dio la cara ante los nuestros y vendió cara su derrota. Orgullo e implicación, adjetivos que en tiempos difíciles acompañaban a nuestro Granada CF, hoy ya no.
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