Uno a uno: Mariño, una solución de emergencia que ha cumplido con creces
El guardameta ha cubierto con seguridad las ausencias de Luca Zidane
Tras cerrar su etapa en el Almería y quedarse sin equipo, Mariño aguardaba una nueva oportunidad que le llegó con la llamada del Granada, que necesitaba un recambio para Luca Zidane tras la inesperada lesión de rodilla del guardameta francés.
El arquero gallego no dudó en aceptar la propuesta del conjunto rojiblanco, que conseguía un portero de garantías y experimentado. Después de una pequeña puesta a punto, Mariño debutó como rojiblanco en la séptima jornada, coincidiendo con la llegada de Escribá al banquillo nazarí.
Con Mariño en la portería, el Granada fue escalando posiciones y el vigués echó el cerrojo en tres de sus cuatro primeros encuentros, demostrando que la inactividad no le había pasado factura. Aunque Luca se recuperó por completo, Mariño se mantuvo como titular durante once jornadas consecutivas, con un rendimiento que no dejaba lugar al debate.
Con una actuación brillante en Copa, Luca se reivindicó y logró volver a la titularidad, un privilegio que mantuvo durante once jornadas, hasta que el Córdoba otra lesión se cruzó en su camino, cambiando un decorado que ya se antojaba inamovible hasta final de temporada.
De forma inesperada, Mariño se encontró con una nueva oportunidad y no la desperdició, mostrando de nuevo un gran nivel bajo los palos. Con Pacheta parecía que la cosa no iba a cambiar, pero un error del gallego en Riazor parece que le hizo cambiar de opinión, dejando a Mariño como suplente en las dos últimas jornadas.
Mariño acaba contrato, pero el club estudia la posibilidad de ofrecerle una ampliación para que siga interpretando ese papel de secundario de lujo, listo para rendir cuando las circunstancias lo demandan, como ha hecho este curso.
Mariño, Marc Martínez, Brau, Ricard, Rubio, Jozwiak y Bastón proseguirán sus carreras lejos de Los Cármenes
El capitán abandona el conjunto rojiblanco tras ocho temporadas
