Bloqueo y continuación
La plantilla del nuevo Coviran Granada, uno a uno
Arrancó la pretemporada del remozado Coviran Granada 2024-25, con una plantilla que, a pesar de mantener prácticamente la mitad de sus elementos con respecto a la pasada temporada, sí que deja entrever cambios importantes no solo en los nombres, sino en los perfiles y el juego que de ellos quiere extraer Pablo Pin, que continúa un año más al frente del equipo.
El juego exterior es donde menos variación presentan los nazaríes. La continuidad de Jonathan Rousselle y Pere Tomàs aportará el elemento de veteranía y ascendencia con los recién llegados. También siguen Elias Valtonen y Scott Bamforth, refuerzos del último tramo de temporada que cuajaron buenas actuaciones y que tendrán, a priori, un mayor impacto toda vez que se encuentran ya asentados en la ciudad y el equipo. Los principales cambios llegarán en la dirección de juego, donde Lluis Costa, tras marchar a Tenerife, ha sido sustituido por Sergi García, que tratará de subir un punto en el aspecto físico y de intensidad defensiva. Completarán el perímetro rojinegro el uruguayo Agustín Ubal, apuesta de futuro para el puesto de teórico tercer base y el puertorriqueño Gian Clavell, llamado a ser la referencia anotadora desde la línea de 3 puntos y el hombre que debería jugarse las bolas calientes en finales apretados.
En el juego interior se han producido un mayor número de cambio de piezas, buscando la dirección deportiva un perfil más versátil y defensivo, aun a costa, quizá, de quedar algo escasos de centímetros. Como única referencia clara en el puesto de pivot estará Rubén Guerrero, que teóricamente partirá desde el banquillo. Jacob Wiley continuará siendo el 5 titular de los nazaríes, con la posibilidad de alternar como 4 si es preciso gracias a su energía y movilidad.
El ala pivot titular será Amine Noua, con dilatada experiencia en Euroliga y que está llamado a ser el jugador franquicia de los granadinos, aunque la confección de plantilla deja entender que lo que se busca es un equipo coral y que mantenga el nivel en todo momento, sin marcadas diferencias entre titulares y suplentes. Edgar Vicedo alternará el puesto de ala pivot con el de alero, gracias a su versatilidad, y el último hombre interior será el debutante en la categoría Iván Aurrecoechea, una de las sensaciones de la última temporada en LEB Oro y que puede ser una agradable sorpresa por su intensidad y capacidad reboteadora.
En apariencia, la intención del cuerpo técnico de Coviran Granada es dotar al equipo de una mayor capacidad defensiva, contando con jugadores más rápidos y móviles, que se puedan adaptar a varias posiciones y que eleven al máximo la intensidad de la presión a los rivales. La ausencia de una referencia clara como estrella del equipo puede ser un arma de doble filo, así como la escasez de centímetros en el juego interior, algo que hará ser más veloces a los nazaríes, pero que en determinados contextos puede ser arriesgado. Sea como sea, esta tercera temporada de los rojinegros en ACB debe ser la de la consolidación definitiva y la que, ojalá, traiga una salvación algo menos cardíaca que en las dos anteriores. Buenos mimbres hay para ello.
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