Uno a Uno
ROBERTO (6): se mostró algo dubitativo en varias acciones a balón parado, aunque estuvo seguro en el juego con los pies y dejó un par de buenas intervenciones a disparos lejanos. Muy concentrado durante todo el partido, dirigiendo a la perfección a sus centrales.
NYOM (8): la mejor versión Nyom apareción nuevamente para dejar un partido sobrio en defensa, muy generoso en el esfuerzo y con mucha presencia ofensiva. La banda derecha fue infinitamente más protagonista que la izquierda en el juego de ataque rojiblanco debido al ímpetu del camerunés.
CALA (5): ante el equipo donde se formó como futbolista cuajó un partido decente, serio y sin grandes alardes. Con las líneas del equipo muy juntas no se notaron tanto sus carencias físicas y pudo solventar la mayoría de accione con acierto, aunque su estado de forma sigue estando un poco por debajo de lo exigible.
MAINZ (6): hasta el gol del empate que se anotó en su propia portería, el partido del capitán rojiblanco estaba siendo prácticamente perfecto. Autor del gol rojiblanco con un perfecto remate de cabeza, asumió además los galones de líder de la zaga con acierto. Le sigue faltando un punto en lo físico, y quizás por ese motivo llegó tarde a algunos rechaces, como el del propio autogol.
INSÚA (3): el argentino pone voluntad pero le falta mucho para ser un lateral de garantías. Le falta calidad técnica en ataque, y en defensa es una caja de bombas, capaz de lo mejor y de lo peor.
FRAN RICO (6): la ausencia de Javi Márquez posibilitó la vuelta al once inicial del gallego, que actuó como organizador de juego en la especia de 4-1-4-1 que dispuso Abel Resino. El envío de córner que finalizó con el gol de Mainz es suyo, y también ejecutó un par de acciones más con peligro. En lo defensivo, se vio superado en algunos momentos.
RUBÉN PÉREZ (6): sin que sirva de precedente, el astigitano se vio eclipsado en el centro del campo ante el trabajo de su compañero de posición, Iturra, que incluso lo eclipsó en algunas fases. Aun así, el trabajo de Rubén fue una vez más muy valioso, ayudando en la elaboración del juego y dando lo mejor de sí en defensa.
ITURRA (9): el major Iturra de la temporada estuvo espléndido para sostener al Granada desde el minuto hasta el pitido final. Derroche de facultades físicas acompañadas de mucha casta, y hasta de algunas jugadas de mucha clase que no le habíamos visto al chileno por el momento. Los continuados banquillazos parecen haberlo hecho reaccionar y ha vuelto con mucha fuerza y ganas.
ROBERT IBAÑEZ (5): como siempre, el valenciano dejó alguna jugada personal peligrosa y varios detalles, pero su integración con el colectivo sigue siendo discutible. En la primera parte se entendió bien con Nyom, pero Success posiblemente echó en falta algún balón de Robert.
CANDEIAS (5): en ataque exhibió su velocidad y hasta pudo hacer gol en una contra, donde se plantó con opciones de remate tras un enorme pase de Success. Como contrapunto, Aleix Vidal le ganó la espalda de manera muy inocente en el gol del empate sevillista. Posiblemente, Resino aguantó mucho el cambio del portugués, que estaba castigado físicamente.
SUCCESS (9): la gran sorpresa en el once fue la vuelta al primer equipo, y como titular, del nigeriano. Seguramente, su titularidad vino inducida más por el descontento del técnico ante Córdoba y El Arabi, que por las garantías que pudiera ofrecer Isaac. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Sería interesante que los dos citados delanteros rojiblancos, que posiblemente tengan una ficha diez veces superior a la del joven jugador del filial, vieran el partido con atención, ya que Success les regaló una clase magistral de cómo ser delantero en el Granada. Peleó todos los balones, aguantó los pelotazos dando salida al equipo, e incluso tuvo tiempo para crear varias ocasiones en acciones individuales. No en vano, el córner que dio origen al gol nace de una gran jugada que el mismo se inventó. Sin duda, su regreso al filial le ha servido para ganar en confianza y volver más fuerte con los mayores.
LASS (s.c): cambio postrero el del extremo guineano, que no tuvo tiempo más que para defender. Volvía al equipo tras varios partidos ausente.
JUAN CARLOS (s.c): posiblemente, si su entrada al campo no se hubiera retrasado tanto, podía haber aportado más para sostener el 1-0, aunque cuando ingresó en el campo no tuvo minutos para mucho.
PITI (s.c): Resino le pegó el banquillazo, y cuando salió sólo le dio tiempo a mandar al cielo de Los Cármenes la última jugada de peligro de los suyos, poniendo en juego de manera horrible una falta lateral.
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