El Granada despierta del sueño en Vallecas, 3-1

Incho Cordero  |  14 de marzo de 2015
Córdoba pugna con Iván Amaya en una acción del encuentro (LOF)
Córdoba pugna con Iván Amaya en una acción del encuentro (LOF)
El Granada se desmorona en la segunda mitad tras el empate rayista y se deja los tres puntos en una media hora final que no supo gestionar cuando tenía el viento a favor. Bueno se encargó de demostrar el valor de un jugador capaz de hacer goles en los momentos clave
 

El Granada buscaba en Vallecas la segunda victoria consecutiva, tras las buenas sensaciones experimentadas la semana pasada frente al Málaga, que elevó considerablemente la moral de los jugadores y la afición. El paso dado el sábado pasado debía refrendarse en un campo complicado como Vallecas.

El equipo no estuvo solo. Los autobuses fletados por los jugadores y el desplazamiento masivo de aficionados hasta Madrid ponía de manifiesto la importancia del choque, que había sido cuidado de forma especial durante la semana previa.

El Granada empieza mejor y empieza mandando en el marcador

Y no pudo empezar mejor el partido para el Granada. Tenía el control del balón y miraba a la portería visitante con descaro, lo que desactivaba a un Rayo siempre peligroso por el fútbol que practica. El equipo de Resino controlaba los tiempos del partido y demostraba ser consciente del enorme valor de los puntos en juego.

Las buenas sensaciones de inicio se trasladaron al marcador cuando en un buen desmarque de Córdoba, que evitó el fuera de juego de la adelantada defensa rayista, el Granada se ponía por delante en el marcador. El primer paso estaba dado, y el gol del colombiano suponía un paso de gigante para el reto de conseguir los tres puntos en Vallecas.

El Rayo aprieta, pero no marca

Tras el gol el Granada sabía cuál era el camino a seguir: plantarse bien en el campo, reforzar las ayudas y evitar la línea de pase entre Trashorras y Bueno, que pudiera hacerle un roto al equipo. El centro del campo rayista no acababa de funcionar, pero cuando el balón se acercaba a las inmediaciones del área de Oier, el peligro se intuía.

Fue así como los de Jémez consiguieron crear oportunidades suficientes para equilibrar el partido, aunque en unas ocasiones el meta vasco del Granada y en otra el larguero, evitaron la igualada. Los balones dentro del área del Granada eran un peligro constante para la portería de Olazábal, que a trufaba sus intervenciones de mérito con las dudas a las que ya nos tiene acostumbrados.

El impulso le duró al Rayo veinte minutos. Pasada la primera media hora el Granada volvió a templar el partido y a la propuesta inicial. Y también tuvo sus oportunidades de ampliar la ventaja, con dos testarazos que no encontraron meta, de Márquez y Babin. Pero lo cierto es que nadie volvió a marcar antes del descanso y el Granada se fue a vestuarios con la ventaja lograda por Córdoba al inicio del partido.

El Granada se descompone tras los primeros minutos de la reanudación

La reanudación fue un calco de lo sucedido en la primera mitad. El Granada copió su inicio de partido y le robó el balón al Rayo, que veía como pasaban los minutos sin poder ni siquiera acercarse al área rojiblanca. El fútbol control de Abel permitía que pasaran los minutos sin demasiados sobresaltos para los intereses de su equipo.

Pero cuando mejor le iba al Granada, los detalles volvieron a marcar las diferencias. Jémez, inconformista permanente, hizo dos cambios transcurrida la hora de partido. La entrada de Manucho fue providencial para su equipo, ya que busco un balón al que Murillo no atenció con la suficiente diligencia y sirvió para que Bueno, una vez más acudiera al rescate de su equipo.

Jémez lanza a su equipo por la victoria tras la igualada

El gol de la igualada generó muchas dudas en el equipo rojiblanco, que no volvió a ser el mismo el resto del partido. El Rayo aprovechó la inercia y demostró que el fútbol es un estado de ánimo, aunque no sólo. En un nuevo giro de timón, Jémez, que siempre apuesta a caballo ganador, dejó su defensa con tres hombres y se envió a sus chicos a por la victoria, como fuera.

La convicción en la victoria era total y el paso de los minutos empezaban a ser dramáticos para el Granada, incapaz de parar las acometidas del cuadro local. Tanto, que el gol rayista al final fue inevitable, una vez más logrado por Bueno, que demostró por qué se habla tanto de él. Aprovechó unamagníficaa asistencia de Kakuta, que superó a los centrales granadinistas de forma irremediable.

El resto del partido fue una lucha contra el crono que llevó al Granada al caos táctico. No volvió a generar peligro, y se descosio de tal manera que al final la cosa pudo acabar en goleada, si no hubiera sido por el desacierto en los metros finales de los jugadores vallecanos.

Golpe duro para un Granada que vio como se le escapaba otro partido de forma incompresible. Otro más.

Rayo Vallecano: Cristian, Quini (Manucho, 63’), Zé, Amaya, Nacho, Baena, Trashorras, Licá (Embarba, 63’), Kakuta, Bueno, Leo (Insúa, 80’)

Granada CF: Oier; Nyom, Babin, Murillo, Insúa; Fran Rico, Rubén Pérez, Márquez (Rober Ibáñez, 73’), Piti, Rochina (Riki, 80’); Córdoba

Goles: 0-1: Córdoba, min. 8; 1-1: Alberto Bueno, min. 65; 2-1: Alberto Bueno, min. 76; 3-1: Embarba, min. 93

Árbitro: Alejandro José Hernández Hernández (colegio canario), que amonestó a Baena, Amaya y Bueno, por parte de los locales, y a Rubén Pérez e Insúa, por parte del Granada.

Incidencias: Partido correspondiente a la Jornada 27 de la Liga BBVA entre Rayo Vallecano y Granada CF, disputado en el Estadio de Vallecas.

cordero@granadaenjuego.com

@inchocordero
 
 
Noticias relacionadas
05/05/2025 | Redacción

Granada es la única provincia de toda Andalucía que ofrece a todas las federaciones deportivas la posibilidad de acceder a este tipo de ayudas

05/05/2025 | Jorge Azcoytia

La plantilla disfrutará el miércoles de una jornada de descanso

LALIGA HYPERMOTION
Advertisement