Los rojiblancos hicieron aguas en defensa y comenzaron de la peor forma posible la Liga perdiendo por tres goles ante su afición.

El partido comenzó con un Granada valiente en busca de la portería contraria queriendo llevar el peso del juego en Los Cármenes. Los rojiblancos originaban las primeras ocasiones de peligro y en el minuto 14 llegó la primera acción polémica del encuentro. Un balón largo al área rival provocó que el meta del Eibar, Irureta, llegara tarde para blocarlo y se topó con El-Arabi impidiendo que el atacante lograse alcanzar el esférico. Pero el colegiado no lo vio así y no señaló la pena máxima.

El que golpea primero, golpea dos veces

Aun así, los granadinistas se encontraban cómodos y sufrían las llegadas del Eibar con cuentagotas. Pero en el minuto 21 llegó el primer jarro de agua fría para el público rojiblanco. Una buena jugada trenzada desde la banda izquierda hizo que Luna acabara metiendo un centro al corazón del área donde Adrián consiguió controlar y rematar con el empeine para colocar el balón al palo largo y anotar un tanto imparable para Andrés Fernández. A la pasividad de la defensa rojiblanca hay que sumarle las pocas ayudas que ofrecían los jugadores del centro del campo, bajando poco para brindar más apoyos a sus zagueros.

La defensa rojiblanca, un desastre

El Granada no se rendía y continuaba atacando la meta rival a través de El-Arabi con un potente disparo raso que Irureta logró despejar. A pesar de los intentos por poner las tablas en el marcador, el partido se iba a complicar aún más para los rojiblancos. En el minuto 35, otra jugada en contra por el carril derecho del Granada supuso el segundo tanto de los visitantes. Otra incorporación rápida del lateral zurdo Luna originó un centro raso que Andrés Fernández no logró despejar lejos del área y que cayó en los pies de Escalane, completamente solo dentro del área pequeña, para hacer el segundo gol del Eibar en Los Cármenes. De nuevo la pasividad de la zaga rojiblanca y las pocas ayudas a la defensa quedaron en evidencia.

Los de Sandoval quisieron recortar distancias en el luminoso pero solo conseguían crear peligro a balón parado mediante una falta al borde del área de Rochina que el arquero logró despejar a saque de esquina y mediante un remate de Robert Ibáñez que se marchó muy cerca del palo izquierdo de la portería visitante.

La entrada de Success cambió al Granada

Finalizaban los primeros 45 minutos y el Granada se fue al descanso con un desfavorable 0-2. Por ello, Sandoval decidió mover el banquillo y dio entrada al comienzo de la segunda mitad a Miguel Lopes y a Isaac Success, sacrificando del once a Foulquier y Piti. Y al entrenador granadinista le funcionó rápidamente el doble cambio. En el minuto 49, un activo Success cogió el balón en la banda derecha deshaciéndose de su marcador para poner un centro raso al primer palo que recogió Rochina, llegando desde atrás, para colar el balón dentro de la meta del Eibar. Los Cármenes se crecieron y veían factible la remontada de su equipo.

Expulsión y adiós remontada

El Granada volvía a estar dentro del partido pero sus opciones de remontada disminuyeron con una rigurosa expulsión de Salva Ruiz. El lateral izquierdo rojiblanco cortó un contragolpe del Eibar chocando con el rival y el colegiado le mostró la cartulina roja de manera inmediata. Nuevo mazazo para los de Sandoval.

A pesar de la inferioridad numérica, los rojiblancos siguieron volcados en el ataque y a punto estuvieron Rochina, con un fuerte disparo desde fuera del área, y Babin, con un remate de cabeza a la salida de un córner, de lograr el tanto granadinista.

Arruabarrena puso la puntilla

Al igual que en la primera mitad, cuando mejor se encontraba el equipo nazarí sufrió un nuevo tanto en contra que acabó con las esperanzas de los locales. Un saque de esquina botado por el Eibar era peinado por Ramis dejando solo a Arruabarrena para que éste solo tuviese que empujar el balón en la línea de gol.

El equipo de Sandoval intentó recortar distancias en los últimos compases del encuentro pero el Eibar, muy bien organizado, desbarataba cualquier ataque rojiblanco. El partido finalizó con el definitivo 1-3 en el marcador y con un Granada cabizbajo que no cumplió con lo esperado en esta primera jornada liguera. Primer varapalo de los rojiblancos esta temporada que se enfrentarán la próxima jornada al Getafe en el Coliseun Alfonso Pérez. 

Granada CF: Andrés Fernández; Foulquier (Miguel Lopes, 45’), Babín, Mainz, Salva Ruiz; Javi Márquez, Rubén Pérez, Rochina, Piti (Success, 45’), Robert Ibáñez (Edgar, 72’) y El-Arabi.

SD Eibar: Xabi Irureta; Capa, Ramis, Dos Santos, Luna; Keko, Dani García, Escalante, Saul (Juncá, 74’); Enrich (Bastón, 79’) y Adrián (Arruabarrena, 65’).

Árbitro: Iglesias Villanueva. Amonestó por parte del Granada CF a Mainz. Y por parte del Eibar a Keko, Adrián, Dani García, Luna, Escalante y Capa. Expulsó con tarjeta roja directa a Salva Ruiz.

Goles: 0-1, Adrián (21’); 0-2, Escalante (36’); 1-2, Rochina (49’) y 1-3, Arruabarrena (67’).

Incidencias: Partido correspondiente a la primera jornada de la Liga BBVA 2015/2016 disputado en el Estadio Nuevo Los Cármenes ante 14795 aficionados.

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