Alcaraz, el 'coche escoba' rojiblanco
El centrocampista se debe convertir en el líder moral de los de Pacheta
Después de un mercado centrado en la incorporación de jugadores jóvenes y faltos de experiencia, el Granada detectó la necesidad de añadir veteranía a una plantilla que rezuma bisoñez, añadiendo a la mezcla a Rubén Alcaraz, un futbolista curtido en mil batallas, que llegaba a 'Los Cármenes' con la responsabilidad que convertirse en el comandante en plaza de los nazaríes.
Tras rodarse ante Málaga y Leganés, Pacheta decidió apostar por el catalán para actuar de inicio en El Plantío, buscando elevar el nivel competitivo y la solidez del equipo ante la inconsistencia mostrada en las anterior jornadas, una misión que Alcaraz supo interpretar con acierto, actuando como el cemento de los rojiblancos.
Más allá de todo lo que puede hacer sobre el verde, Alcaraz aporta una gran lista de intangibles; es capaz de alzar la voz y conectar a sus compañeros, intimidar al rival en el momento justo o presionar al árbitro, virtudes que no se aprenden en ninguna academia y que son tan importantes como el porcentaje en los pases o los duelos ganados, algo donde el ex del Cádiz también es sobresaliente.
Alcaraz debe ser el abanderado de este equipo, al que sigan sus compañeros sin importar el destino, una pieza necesaria para que el resto de engranajes funcionen a la perfección, algo de lo que Pacheta también parece consciente, por lo que el protagonismo del barcelonés parece que se va a acrecentar en las próximas jornadas.
En la medular, Alemañ también parece estar ganándose los galones a pulso y cuando regrese Sergio Ruiz podrían formar una sala de máquinas fiable y dinámica, capaz de ejercer como resorte en ataue y como muro de contención cuando ataque el rival, algo vital para que el Granada comience a cosechar buenos resultados.
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