El Granada, un club vendedor
Con la venta de Villar, el conjunto rojiblanco habrá ingresado algo más de 70 millones de euros en las últimas temporadas
Para un club como el Granada, retener el talento siempre es una misión compleja, por lo que es vital saber vender para mantener un proyecto estable, viable y que pueda ir creciendo de manera orgánica. En las últimas temporadas, el conjunto rojiblanco ha exprimido sus recursos, sacando una buena tajada con varios movimientos que han llenado las arcas del club con unos 70 millones de euros.
En el pasado mercado invernal, el Granada se mantuvo firme con Uzuni, remitiendo a su cláusula de rescisión, una cantidad de 12 millones de euros que finalmente el Austin accedió a abonar, convirtiendo al albanés en una de las ventas más importantes en la historia del club.
Un año antes fue Bryan Zaragoza quien hizo saltar la banca, con un traspaso tasado en unos 14 millones a los que se añadieron otros tres por su cesión durante los últimos meses de competición, una operación redonda en lo económico para el Granada, que además veía como Samu hacía las maletas a cambio de seis millones de euros.
Además de esas dos salidas, la marcha de jugadores como Arezo, Meseguer y André Ferreira también supusieron un flujo importante de dinero para las cuentas nazaríes, que seguían aumentando.
En la temporada 2022/23 la cuentas del conjunto rojiblanco volvieron a teñirse de verde con los traspasos de Maximiano y Luiz Suárez por unos diez millones cada uno, la salida de Milla al Getafe por cinco millones más la llegada de varios jugadores a 'Los Cármenes' y las ventas de Machís y Monchu, que casi suman otros cinco millones.
Con todo ese flujo de dinero, el Granada tiene ahora que invertir bien y acertar con las incorporaciones para formar un equipo competitivo que pueda competir por regresar a Primera.
El conjunto croata abonará unos tres millones de euros por la operación