La competencia interna crece en el Granada
Con Escribá la lucha por un puesto en el once titular se ha recrudecido
Igual de importante que encontrar un once sólido y competitivo es avivar la llama de la lucha interna por un puesto en el once titular, empujando a los jugadores a exprimirse en busca de su mejor versión, algo que Escribá está consiguiendo desde su llegada, repartiendo minutos y oportunidades basándose en la meritocracia.
En la portería, a Escribá no le tembló el pulso y, nada más aterrizar en Los Cármenes, colocó a Mariño bajo los palos, una decisión que ha mantenido en el tiempo a pesar de la recuperación de Luca Zidane, que ha tenido que trabajar duro para volver a aparecer en la foto de inicio, un privilegio que tendrá que mantener con trabajo si no quiere volver al banquillo.
Ricard parecía perenne en el lateral derecho, un ‘statu quo’ que ha cambiado en las últimas jornadas con la irrupción de Rubén Sánchez, lo que obliga al lateral catalán a mejorar sus prestaciones. En el otro flanco, con la recuperación de Nava la competencia también regresará tras el buen nivel ofrecido por Brau durante los últimos meses.
En el centro de la defensa, con seis candidatos para dos puestos, la pelea por ganarse un hueco entre los titulares también está siendo intensa. En los últimos encuentros Williams e Insua parecen haberse asentado como los elegidos, pero no pueden relajarse, ya que detrás esperan Rubio, Oscar y Miquel para intentar tener más protagonismo.
Donde más claro parece el estatus es en la medular, donde Villar y Hongla parecen asentados en la titularidad, una situación que intenta cambiar Sergio Ruiz, que cada vez que tiene una oportunidad está firmando actuaciones sobresalientes, demostrando a Escribá que está preparado para cuando la situación lo requiera.
Tsitaishvili es uno de los fijos para Escribá, circunstancia propiciada, en parte, por la falta de competencia en ese puesto, donde el georgiano es la única pieza que ofrece ciertas garantías, algo que empuja al Granada a buscar refuerzos en esa demarcación en el mercado invernal.
En el perfil zurdo varios candidatos han pasado por el puesto sin ganarse la continuidad, algo que parecía haber cambiado con Rodelas hasta su lesión en el penúltimo encuentro del año, lo que reabre de nuevo el casting.
Con Uzuni como dueño de un puesto fijo en el once y hasta que Boyé se recupere, Escribá también ha repartido oportunidades para acompañar al albanés en la punta de ataque, pruebas con Reinier o Weissman que no han sido satisfactorias y que deja el puesto vacante para aquel futbolista que lo quiera reclamar con trabajo y rendimiento sobre el césped.
En técnico ha confirmado que tiene contrato hasta 2027
"Me sorprendieron las declaraciones de Escribá, están fuera de tono", ha admitido el director general del Granada