La hora de Quini
La marcha de Foulquier dará mañana la oportunidad al cordobés de reivindicarse en la que fue su casa durante tres años
El destino es caprichoso y ha querido que Joaquín José Marín Ruiz `Quini´ tenga la oportunidad de estrenarse esta campaña con el Granada en un estadio que conoce a la perfección. La marcha de Dimitri Foulquier al Valencia provocará que Robert Moreno tenga que emplear a un inquilino distinto en el lateral derecho ante el Rayo Vallecano, ya que el único utilizado durante las dos primeras jornadas había sido el francés. A pesar de la cesión (a falta de oficialidad) del atlético Santiago Arias, esa función recaerá el domingo sobre Quini.
El futbolista de Fernán Núñez vistió la elástica del Rayo Vallecano entre 2014 y 2017. Antes ya había debutado como profesional en las filas del Real Madrid Castilla, pero en el barrio de la capital de España se consagró dentro del panorama nacional. Jugó un total de 77 partidos en tres temporadas hasta que en verano de 2017 firmó por el Granada.
La historia de Quini en la ciudad de la Alhambra se puede resumir en dos palabras: paciencia y sacrificio. En un principio, el cordobés llegó al equipo de José Luis Oltra para jugar de extremo, aunque no gozó de muchas participaciones en su primera campaña. Fue tras la llegada de Diego Martínez y una lesión de Álex Martínez en Málaga cuando el técnico gallego decidió optar por él para cubrir el lateral zurdo ante la falta de efectivos. En esa posición deslumbró durante el año del ascenso.
Quini arrancó el curso del retorno a Primera como el lateral habitual de Diego. Sin embargo, una desgraciada lesión en diciembre de 2019 le dejó en el dique seco para el resto de la temporada. No reapareció hasta un año después, aunque Neva ya le había ganado el sitio. Tampoco entró en la lista UEFA para jugar la Europa League, algo que asumió con una deportividad admirable. Acabó la campaña pasada estrenándose como goleador en la máxima categoría con el tanto de la victoria en Pucela, un premio más que merecido después de tanto sufrimiento.
Ahora, el bueno de Quini tiene todas las papeletas para estrenarse oficialmente esta liga en el campo donde disfrutó jugando tres años. Incluso el club publicó en sus redes sociales una imagen del cordobés prácticamente al mismo tiempo en el que Foulquier pasaba reconocimiento médico con su nueva escuadra, dando su guiño particular al asunto. El francés ya no está, pero el 17 sabe de sobra cómo ayudar al equipo. Siempre lo ha hecho, y siempre ha estado disponible en cualquier circunstancia gracias a su voluntad y espíritu de, nunca mejor dicho, eterna lucha.
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Álex Sola, con su gol y su trabajo en ataque y defensa, fue el mejor de un Granada que supo sufrir en 'El Plantío' para sumar su segundo punto de la temporada
"Nos hemos enfrentando a un gran equipo que no está en un buen momento", ha recordado el entrenador del Burgos
