Limpia, fija y da esplendor
CONTRACRÓNICA | Escribá ha conseguido cambiarle el semblante al Granada en apenas dos semanas
El partido ante el Mirandés no ocupará un lugar destacado en los libros de historia del Granada, no fue la victoria más brillante, pero el conjunto rojiblanco actuó como un equipo, con las ideas claras y un plan bien trazado, ingredientes que bastaron para lograr los tres puntos, mostrando una versión competitiva inédita en este arranque de competición.
Subirse a un tren en marcha no suele ser una tarea sencilla, pero Fran Escribá lo ha hecho con elegancia y sin despeinarse. El técnico valenciano parecía tener claro el diagnóstico de los males que asolaban al cuadro nazarí y en tiempo récord ha conseguido remendar las costuras que no dejaban crecer al equipo.
En Burgos, el Granada ya mostró una versión mucho más sólida y equilibrada, sensaciones que refrendó en Anduva, escenario donde los rojiblancos completaron un ejercicio de supervivencia y resiliencia, resistiendo sin desmoronarse y sin entrar en pánica las embestidas del rival.
No todo fue perfecto y, como reconoció el propio Escribá tras el encuentro, el equipo tiene aún mucho margen de mejora, pero los pilares se han colocado con diligencia, bases sólidas sobre las que crecer y que permitan aflorar todo el talento que contiene la plantilla nazarí y que hasta ahora estaba maniatado por la táctica.
Escribá ha absorbido la presión sin alharacas, ha impuesto el sentido común y ha colocado las piezas sobre el tablero de una forma coherente, ofreciendo soluciones prácticas y efectivas que han devuelto al equipo a los raíles correctos.
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