Los exrojiblancos se lucen lejos de Granada
Weissman logró un doblete y Ricard se estrenó en Portugal, mientras que Corbeanu también vio puerta
En los últimos tiempos un hechizo parece atrapar a ciertos jugadores que visten de rojiblanco horizontal, lastrando su rendimiento sobre el césped, un encantamiento que se rompe cuando abandonan la ciudad de la Alhambra, como han demostrado en la última jornada Weissman, Ricard y Corbeanu.
Weissman parece un caso paradigmático. El delantero israelí ha sumado un total de 48 encuentros de Liga con el Granada, en los que ha sido capaz de perforar la portería rival en tres ocasiones, como si el olfato goleador que le llevó a firmar 20 dianas con el Valladolid o 30 con el Wolfsberger se hubiese disipado de golpe.
Pero el de Haifa parece haber recuperado la puntería y en su estreno con el BW Linz fue capaz de rubricar un doblete, dándole la primera victoria del curso a su nuevo equipo, volviendo a ser ese delantero letal por el que apostó en su día el conjunto rojiblanco.
Ricard también ha comenzado a rendir a gran nivel en Portugal. En su último encuentro con el Estoril, el ex del Granada fue capaz de marcar un tanto y dar un pase de gol, completando un encuentro notable y siendo pieza clave en el triunfo de los suyos, mostrando esa gran proyección ofensiva que ya desplegó en 'Los Cármenes'.
Tampoco le van mal las cosas a Corbeanu en la MLS, donde milita en el Toronto FC. El de Ontario siguió la estela de Weissman y Ricard y también vio puerta, marcando el gol del empate ante New England. El extremo suma en lo que va de curso media docena de tantos y dos asistencias, una capacidad que no pudo desplegar en el Granada, donde podría retornar en el mercado invernal o dejar dinero en las arcas nazaríes si el cuadro canadiense decide ejercer la opción de compra.
Villar, que fue el primer en marcharse traspasado este verano, consiguió estrenar su cuenta goleadora con el Dinamo de Zagreb tres jornadas atrás, rubricando un tanto de bella factura en el triunfo por 3-0 ante el Istra.
Por su parte, Stoichkov y Boyé aún están cogiendo ritmo en sus nuevos destinos. El delantero argentino se estrenó con el Alavés disputando 45 minutos en San Mamés, mientras que el gaditano ya ha actuando en tres encuentros con el Deportivo, sumando 87 minutos en los que todavía no ha sido capaz de marcar.
El conjunto rojiblanco nunca había sumado un solo punto tras cinco jornadas
El centrocampista no pudo celebrar tal efeméride con una victoria