Para Robert todo salió bien
CONTRACRÓNICA | El Granada sale derrotado de 'Balaídos' en el minuto 94, pero su técnico se mostró satisfecho por cuajar el plan de partido que tenía preparado
Para gustos, los colores. La derrota del Granada en ‘Balaídos’, cuarta de la temporada y que deja al conjunto rojiblanco sin conocer la victoria en siete jornadas de liga y en descenso, fue vista desde perspectivas diferentes por la afición y por Robert Moreno. Los seguidores rojiblancos sufrieron un mazazo terrible tras ese gol de Denis Suárez en el minuto 94 y ven muy negro el futuro del equipo. Sin embargo, el técnico catalán tiró de orgullo en rueda de prensa y para nada salió disgustado por el planteamiento de los suyos. Al contrario. El tanto del centrocampista celeste podría quedar, incluso, como una anécdota para él, ya que el conjunto nazarí hizo a lo largo del encuentro lo que deseaba.
Un plan de partido muy claro, que gustó y disgustó a partes iguales, pero eficiente durante 93 minutos si el objetivo era puntuar. Siendo realistas, haber salvado el empate en casa del Celta no era una idea nada mala después de lo visto sobre el terreno de juego. El Granada estuvo muy organizado atrás, parecía conformarse con la igualada, y esperó su oportunidad al contragolpe. Hasta pudo marcar justo antes del gol celtiña.
Si Luis Suárez o Alberto Soro hubieran estado más acertados en aquella doble ocasión en el descuento, todo se vería ahora de color de rosas. Hasta se alabaría al entrenador por el modelo empleado en su antigua casa. Un triunfo que posiblemente se hubiera tachado de inmerecido por los méritos de unos y otros. Eso sí, la derrota también parece un castigo duro, y más por la forma en la que se produjo. O, mejor dicho, el momento.
Los últimos minutos están suponiendo un lastre lapidario para este Granada de Robert Moreno. En Villarreal casi se inaugura la maldición si Foulquier no llega a salvar el mano a mano de Gerard Moreno. Después, Valencia, Betis y Barcelona sacaron fuelle de la parsimonia rojiblanca para aguantar los puntos con los partidos ya consumidos. Si apuramos, la Real Sociedad también se puede añadir a la lista con el tanto de Elustondo en el 83. Lo de Vigo ya fue el colmo de los colmos.
Ese “mini partido” que se escuchaba la temporada pasada en cada encuentro ya no existe. La tensión se ha perdido y el equipo parece seguir aquello que gritan los niños en el patio del colegio. “Quien marque gana” y todos alocados hacia arriba, descuidando por completo la parcela defensiva y encajando goles totalmente evitables. Exceptuando el recibido en el Camp Nou, los demás son difíciles de explicar.
Hurgando más en la herida, el resultado no fue lo único malo a orillas de las Rías Baixas. Luís Maximiano, Domingos Duarte y Gonalons no pudieron terminar el duelo por lesión. Tres pilares básicos en tres líneas del campo. Sin un parte médico esclarecedor por el momento, la preocupación es máxima.
El aficionado del Granada tendrá (no le queda otra) que conformarse con el consuelo de la expresión más usada en cada comparecencia desde que arrancó el campeonato. Ese “ganaremos el siguiente partido” lleva resonando desde la segunda jornada. El domingo harán ocho y visita el ‘Nuevo Los Cármenes’ el Sevilla. La crispación, hasta el minuto noventa y pico, deberá quedar a un lado. Por muy negro que lo vean unos y muy bonito que lo vean otros.
@Francalvo1996
francalvo@granadaenjuego.com
El futbolista uruguayo aclaró que el equipo pelea "por nosotros y por la gente"
El técnico de Osasuna expresó que su equipo quiere "terminar LaLiga bien empezando por ganar este partido"
