Trigueros, hermano mayor
El centrocampista ejerció como capitán y líder del equipo ante el Cádiz
En una plantilla plagada de juventud e inexperiencia, contar con un futbolista como Manu Trigueros puede ser un factor fundamental para la cohesión y el buen funcionamiento del grupo, algo de lo que parece consciente Pacheta, que le ha otorgado al centrocampista galones y la responsabilidad de tutelar a la nueva camada.
Ante el Cádiz, Trigueros saltó al terreno de juego con el brazalete de capitán en el brazo, toda una declaración de intención. El de Talavera de la Reina ejerció como tal, convirtiéndose en el timonel del juego rojiblanco, que mejoraba cada vez que el balón pasaba por su botas.
El ex del Villarreal estuvo muy activo durante todo el encuentro, dio instrucciones, corrigió a sus compañeros y ordenó al equipo, actuando como la extensión de Pacheta sobre el maltrecho césped del Municipal de Chiclana.
Además de todas esas tareas menos agradecidas, Trigueros tuvo tiempo para demostrar toda su calidad con un pase filtrado a Fayé que obligó a Fali a derribar en falta al extremo rojiblanco, una acción que se convirtió en el germen del primer tanto nazarí y que condensa las virtudes del experimentado futbolista, con un toque y una visión de juego privilegiados.
Aunque a los 33 años su tanque de combustible puede que no esté a rebosar, Trigueros puede ser una pieza fundamental en el Granada de Pacheta, pudiendo aportar templanza y sabiduría, además de ofrecer un gran rendimiento en competición.
El Al Wakrah de Vicente Moreno estaría dispuesto a pagar algo más de 2,5 millones por el atacante
"Creo que hemos hecho un buen encuentro", ha indicado el central