Un Granada con dos caras
Los rojiblancos se están mostrando fiables en Los Cármenes e irregulares como visitantes
Tras tumbar al Cartagena con autoridad, el Granada acumula cuatro partidos sin perder en su estadio, con tres victorias y un empate, buenos números como local que quedan empañados por el irregular desempeño de los rojiblancos en la carretera, donde han perdido tres de los últimos cuatro partidos.
En los albores de la temporada, con Abascal en el banquillo, el equipo nazarí arrancó de manera nefasta en Los Cármenes, siendo incapaz de ganar en sus primeros cuatro compromisos ante su afición, una pesada losa que sentenció al técnico sevillano y que Escribá trituró en su primer partido entre los muros del coliseo del Zaidín.
En estas últimas semanas, el Granada ha invertido la tendencia de las primeras semanas de competición, mostrándose casi intratable como anfitrión y dubitativo cuando le toca hacer las maletas. Los rojiblancos suman diez de los últimos 12 puntos en juego en su feudo, con un saldo de diez goles a favor y tres en contra.
El lado negativo llega cuando el equipo abandona el calor del hogar para visitar territorio enemigo. En las cuatro últimas salidas, los de Escribá han encajado tres derrotas ante Zaragoza, Almería y Oviedo, además de un triunfo contra el Sporting, una irregularidad que le ha impedido estar más arriba en la clasificación.
Antes de cerrar 2024, el Granada tiene la oportunidad de quebrar esta mala racha como visitante, aunque para ello también tendrá que romper el maleficio de Ipurúa, un estadio que se le suele atragantar a los nazaríes, que el sábado quieren cambiar la historia.
Los rojiblancos han encajado seis tantos y solo han anotado uno en sus dos primeros encuentros del campeonato
El Granada mostró una imagen preocupante en Ipurúa
