El Huétor Vega amarra la permanencia, 3-1
Los verdiblancos doblegaron en un gran partido técnico y táctico a un rival directo como el River Melilla y consiguen dejar la salvación resuelta
Importante partido el que enfrentó a Huétor Vega y River Melilla, en donde la victoria permitía de manera provisional salvar la categoría a ambos equipos a la espera de que mañana el Alhaurino no hiciera lo propio en su partido ante el San Pedro. Finalmente, fueron los verdiblancos los que se llevaron el agua al golpe al completar un partido muy inteligente en el que mantuvieron a raya a su contrincante en la primera mitad, para asediar a la vuelta de vestuarios y sacar un triunfo que vale una permanencia.
El choque fue disputado por ambas escuadras desde el inicio, con un posicionamiento en el campo para no conceder tregua alguna a su rival, manteniendo una fuerte presión sobre su adversario para no tener excesivos sobresaltos, sabedores de que se jugaban más que tres puntos y que la victoria daba casi por hecha la salvación.
Los hueteños sin embargo no salieron a especular demasiado, y mantuvieron esa actitud combativa desde el principio frente a un equipo trataba de conservar fuerzas y no encajar un gol demasiado pronto.
Con las internadas de Morillas y Salvatierra por banda, Salcedo gozó de algún tímido lanzamiento sobre el arco rival, siendo Armando uno de los efectivos peligrosos también cuando el cuero merodeaba el área visitante.
A balón parado las escuadras tampoco conseguían hacerse daño, y solo el paso de los minutos enfrió la actitud verdiblanca, que no quiso acusar en exceso el calor y el cansancio en el segundo acto, concediendo algo más de metros a su rival, el cual tampoco supo muy bien qué hacer cuando dispuso de la bola, manteniéndose los hueteños seguros atrás y con algo más de ritmo que su rival cuando movían el esférico, llegándose al descanso con todo por decidir tras la reanudación en un primer tiempo más táctico.
El refrigerio sentó bien a los locales, y la charla de Rizos en vestuarios dio sus frutos. Y es que el conjunto verdiblanco saltó muy serio al césped y con clara actitud de ir a por el partido con mayor presión arriba. El tanto llegaría a los cinco minutos con una gran jugada por la banda zurda que se encargaría Dani Salvatierra de resolver para transformar el primer gol.
En pleno estado de shock de los rojinegros, el Huétor Vega asestó un nuevo golpe mortal a la escuadra norteafricana. Armando, que ya había dispuesto de alguna llegada en el primer tiempo, recibió un espléndido pase desde la banda contraria para controlar y recortar a su par, alojando con su chut el cuero en la jaula, y poniendo el choque muy de cara para unos locales que salieron como un vendaval a dejar sellada la permanencia ante su parroquia.
Los goles dieron tranquilidad al bando hueteño, que con todo a su favor, comenzó a dosificar y a guarecerse en su parcela, sabedor de que la solidez atrás, era clave para evitar que los melillenses se metieran de nuevo en el partido.
Estos, con todo perdido, no renunciaron al ofrecimiento de su rival y empezaron a disponer de una obvia y obligada mayor presencia en tareas ofensivas, quedando las intervenciones de ataque local en contras que no terminaban de tener claridad para dar el golpe de gracia a su oponente.
Este llegó en la recta final del choque con una buena salida de balón en una acción en la que el cuero llegó a pasar por varios efectivo locales, cayendo en última instancia en las botas de Salcedo, que no perdonó para cerrar definitivamente la victoria.
No obstante, los melillenses maquillaron el resultado tras errar la zaga en el despeje de la bola, aprovechando el regalo un ariete rival con un lanzamiento que finalmente tocó en Titos para poner el definitivo 3-1 en el marcador, que no empeñaba un partido brillante y muy bien trabajado por parte de un cuadro hueteño que continuará un año más en la categoría.
El evento tuvo lugar en las instalaciones municipales del Núñez Blanca, donde se vivió una jornada inolvidable
