Sergio Peña vuelve al filial por todo lo alto, 3-1
El peruano, que regresaba tras su cesión en el San Martín, firmó dos tantos en el choque que los rojiblancos vencieron al CD Ejido 2012
El Granada regresó a la Ciudad Deportiva de la Diputación para jugar el primer partido de la segunda vuelta como local tras el parón navideño y después de cosechar la primera derrota del año y precisamente de la segunda mitad de la competición ante el Atlético Mancha Real con un gol ya en tiempo de prolongación.
Tras un mercado movido en el seno rojiblanco con algunas salidas, siendo la más sensible la de Clifford al Atlas mexicano, y con algunas llegadas como el regreso de Sergio Peña tras finalizar su cesión con el San Martín y que tras lo visto, demostró con creces haberse ganado un sitio en el once granadino llegando en un momento de forma excelente, afrontaba el cuadro filial un partido ante uno de los conjuntos de su liga, como el recién ascendido Ejido 2012.
La baja de Ally Mallé, convocado por Lucas Alcaraz para el encuentro ante Osasuna, dejaba fuera de la lista a uno de los pilares más importantes del segundo conjunto rojiblanco, así como la de Estupiñán, convocado por la selección ecuatoriana o Navarrete, lesionado en el amistoso disputado ante el Chongqing Dangdai Lifan. Con todas estas circunstancias los locales saltaban a un muy irregular césped armillero con la intención de dejar a un lado la pasada derrota y recomponerse de los movimientos en la plantilla granadinista.
Los locales arrancaron con un tanto de Peña que se difuminó muy pronto al contrarrestar la ventaja Javilillo en una primera mitad complicada, con ocasiones pero sin un juego brillante, y demostraron en la segunda parte la pegada suficiente para llevarse los tres primeros puntos del año, continuando su buena racha como local.
Igualada primera mitad con dos goles tempraneros
El choque no pudo arrancar más animado. Cuando buena parte del público se encontraba acomodándose en sus localidades, Sergio Peña inauguró el marcador y culminó su vuelta a la disciplina granadina, además de con la titularidad, con un tanto que ponía a los granadinistas por delante a las primeras de cambio tras completar con el remate al fondo de las mallas un centro preciso de Marín. No duró sin embargo demasiado la alegría en el seno rojiblanco, ya que solo cuatro minutos después Javilillo devolvería la igualdad al encuentro con un tanto dentro del área que sorprendió a la zaga.
El choque se quedó como si de un empate a nada se tratara y los locales quedaron algo menos precisos que su rival evidenciando falta de ocasiones y acierto en los pases, y careciendo de mayor verticalidad que su adversario. Sin apenas ocasiones ni jugadas bien trenzadas por parte de uno y otro conjunto el juego decayó mas para los locales, que no encontraban su sitio en el terreno de juego. De parte del bando celeste, las noticias eran más favorables y el cuadro del poniente almeriense disfrutaba de mayor dominio que su adversario, llegando la oportunidad más flagrante en un balón que Admonio remató y que se marchó muy cerca de la meta granadina.
En el último cuarto de hora cambiaron las tornas. Los pupilos de Lluis Planagumá se pusieron las pilas y acumularon varias llegadas peligrosas sobre el marco defendido por García. Matheus dentro del área sacó un lanzamiento a la media vuelta que el arquero sacó con la manopla, y de nuevo el brasileño gozó de otra ocasión aun más clara con un mano a mano que no supo culminar ya con el tiempo casi cumplido, finalizando una primera mitad animada y con momentos y ocasiones para ambas escuadras.
El filial no brilla pero sabe sacar tajada de sus acciones ofensivas
Tras el paso por la caseta, el filia entró de nuevo en la dinámica errante que le llevó a estar muchos minutos deambulando por el campo sin conseguir profundizar en su juego y cediendo mucho espacio y comodidad a un Ejido que no pasaba muchos apuros. Pese a ello, el bando de Alberto González tampoco se mostraba con mucha predisposición de crear peligro, impidiendo de paso ofrecer ventaja a su rival con alguna contra rápida, y el juego se mostraba ramplón en general, sin nadie que tomara la iniciativa. La clave parecía estar, como siempre ocurre con los partidos que se encuentran atrancados y faltos de ritmo y llegadas, en las jugadas a balón parado, y el Granada B supo sacar provecho de esto con sus jugadores más altos.
Un saque de esquina efectuado por Tomás lo ganó Pawel por arriba conectando el esférico con la portería ejidense y adelantando de nuevo a los nazaríes. No había juego, pero la estrategia volvió a ser fundamental para desatascar un partido que no pintaba demasiado bien. El Ejido quedó durante algunos minutos algo noqueado y el partido quedó más propicio para los locales, que aguantaban bien en el centro del campo sin sufrir demasiado. Obviamente esta aparente calma y control se vieron alterados en los minutos de la verdad del encuentro.
Los celestes ganaron metros en los minutos finales y generaron cierta incertidumbre a un partido que mantenía un resultado aun incierto. La osadía visitante, más que necesaria y vital para no dejarse al menos el empate en tierras granadinas, terminó por pasarle factura al equipo almeriense. De nuevo Sergio Peña demostró haber llegado en un momento de forma envidiable a la entidad nazarí y certificó el triunfo con un tanto de bella factura que se alojó en la cruceta celeste, dejando el choque visto para sentencia cuando se pisaba el fin del tiempo reglamentario.
Granada CF B: Pol Ballesté 2, Marín 2 (Entrena 2, 69´), Hongla 2, Pawel 2, Tomás 2, Sulayman 2, Pol Llonch 2, Peña 3, Corozo 2, Santana 2 (Jean Carlos 1, 73´) y Matheus 1 (Luís Suárez 1, 83´).
CD El Ejido 2012: García 1, Neto 2, Ocaña 1, Admonio 2, David 1 (Dani Cara 1, 89´), Gabri 1 (Fran Oller 2, 76´), Javilillo 2, Dani Espinar 1, Samu Corral 1, Emilio Cubo 1 y Alfonso 1 (Paquito 1, 82´).
Goles: 1-0 (5´) Peña, 1-1 (9´) Javilillo, 2-1 (61´) Pawel, 3-1 (90´) Peña.
Árbitro: Montoro Garrido, del colegio andaluz. Amonestó al local Peña.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la jornada vigésimo primera de liga en el grupo IV de Segunda División B disputado en la Ciudad Deportiva de la Diputación ante unos 300 espectadores. Terreno de juego en irregulares condiciones.
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