A esto sí sabía jugar el Granada
CONTRACRÓNICA | El conjunto rojiblanco dio una muestra brutal de juego defensivo y durante 88 minutos recordó a las últimas temporadas
Afrontar un partido en el Camp Nou nunca es fácil. Esté como esté el nivel del Barcelona. Se lo podían decir al Granada hasta el curso pasado, y es que nunca había logrado puntuar en el feudo culé en 25 visitas anteriores. El equipo de Diego Martínez rompió el maleficio y, ayer, el de Robert Moreno alargó la historia. La dinámica no invitaba al optimismo: los de Koeman buscaban resarcirse del 0-3 sufrido contra el Bayern y los rojiblancos venían de dos muy malas imágenes. Pero, el conjunto nazarí hizo lo que, sencillamente, tenía que hacer para casi conquistar el coliseo blaugrana.
Más de 27.000 personas se dieron cita en el estadio de Les Corts, aunque los culés tampoco atravesaban un buen momento, al contrario. Sin Messi, Luis Suárez o Griezmann ya en el club, una derrota podía suponer la destitución de Ronald Koeman. El Granada no iba a tener ningún reparo en provocar una debacle azulgrana y así lo hizo saber nada más arrancar el partido, cuando al minuto y medio Domingos Duarte cabeceó al fondo de las mallas de Ter Stegen un centro preciso del debutante Escudero.
La alineación de Robert Moreno desde luego que sorprendió a muchos. Hizo siete cambios con respecto a la derrota frente al Betis, incluyendo a no habituales como Quini, Luis Abram, Eteki o Jorge Molina, además del ya citado lateral pucelano. Maximiano repitió bajo palos y, a buen seguro que cambiará los pitos sufridos ante el cuadro verdiblanco por aplausos el día de la Real Sociedad. Su actuación fue sublime, seguro por arriba y espectacular en un remate de Araujo al filo del descanso.
Dignas de mención también fueron las actuaciones de Quini y Luis Milla. El lateral cordobés demostró por qué debió ser él el sustituto principal de Foulquier y que Robert Moreno no tenía que comerse tanto la cabeza alineando a Víctor Díaz en Vallecas o a Arias la semana pasada. Estuvo colosal en todos los lances defensivos que protagonizó por su banda. Y, del centrocampista madrileño, decir que su noche fue para enmarcar. A día de hoy, uno de los futbolistas más necesarios del equipo y así lo reflejó sobre el campo. Bien con balón y, aún mejor sin. Lo hizo, además, como pivote, una posición no habitual para él.
Con 0-1 en el electrónico aguantaron los rojiblancos (anoche de blanco completamente) durante 88 minutos. Se vio al mejor Granada en lo que va de temporada. Al más organizado, férreo y rápido al contragolpe, con las ideas muy claras. Tanto que, incluso, recordó al equipo que hizo historia no hace mucho tiempo en Europa League. Dejó atrás el paupérrimo tiki taka empleado contra el Betis y basó su juego en lo que mejor sabe hacer este plantel.
Como era de esperar, ponerse en ventaja en el Camp Nou a los dos minutos traería una clara consecuencia. El Barcelona acabaría el partido volcado en área nazarí. Un asedio constante en la segunda mitad que, finalmente, acabaría dando sus frutos para los de Koeman. Araujo, que lo remató absolutamente todo durante el encuentro, puso las tablas y mostró algo que sí tiene que trabajar, y mucho, el Granada. En tres jornadas, ha recibido tres goles en los últimos minutos que ya han costado cinco puntos.
Entraba dentro de los planes ese acoso continuo y que el Barça lograra derribar el muro nazarí. No se pudo sumar la segunda victoria seguida en el Camp Nou, pero fue un duelo que invita al optimismo. El equipo puede y sabe jugar todavía a lo que hacía antes y que tan buenos frutos le dio. Quizás, no sería mala idea mantener el estilo que coronó al mejor Granada de la historia.
@Francalvo1996
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El árbitro gallego, con el que el Granada CF se mantiene invicto, pitará por segunda vez en la presente temporada a los rojiblancos
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