Un muerto bien vivo, 103-94

Jorge Azcoytia  |  1 de febrero de 2012
El Cebé consigue una victoria cargada de simbolismo (BALDOMERO)
El Cebé consigue una victoria cargada de simbolismo (BALDOMERO)

Épico triunfo del Cebé sobre el Logitravel Mallorca, tras dos prórrogas el conjunto de Curro Segura vuelve a saborear un nuevo triunfo tras cinco derrotas consecutivas

 

Entrega, lucha, honor, corazón, compromiso, equipo, superación… los calificativos se quedan cortos para definir la actuación de todos y cada uno de los jugadores del Cebé sobre el parquet. Cuanto más se empeñan las circunstancias en enterrar cualquier esperanza, la plantilla y la afición nazaríes responden con un grito fuerte y claro, ba-lon-ces-to!!

Llegaba el Logitravel Mallorca con la esperanza de enderezar su mal rumbo consiguiendo una victoria sobre un equipo prácticamente desahuciado, pero no esperaba que la resistencia fuese a ser extrema, ni que cada balón se lucharía hasta la extenuación, ni que el rival daría hasta el último aliento para conseguir el triunfo final, pero el Cebé ha sabido transformar la adversidad en unión, regalando un triunfo a la afición, con sabor a despedida. El choque comenzaba trepidante, con transiciones rápidas y anotación fluida. Las defensas eran sobrepasadas sin dificultad y los visitantes conseguían imponer su juego eléctrico. El Mallorca salió con las ideas claras, llevar el partido a una anotación muy alta, manteniendo un ritmo extenuante durante los cuarenta minutos, que dejará en la cuneta al Cebé, pero los chicos de Curro Segura, lejos de amedrentarse, entraron al trapo sin miedo, con la guardia baja, dispuestos a entrar en un intercambio de golpes. José Coego mantenía su estado de gracia y anotaba 13 puntos durante el primer cuarto. Reflejo del juego despreocupado de estos primeros compases es el marcador de 25-30 con el que se llegó al primer parón.

Los buenos porcentajes de tiro estaban condenados a bajar, durante el segundo asalto las imprecisiones se hicieron visibles y al Cebé le costaba anotar con facilidad, pero a pesar de los fallos, los locales fueron limando diferencias hasta colocarse por primera vez en el partido por delante, 36-35. El juego del Granada iba creciendo con el paso de los minutos, retroalimentándose de sus propias acciones, como un mate de Guerra o un triple de Edu Ruiz que encendían los ánimos en la grada. Por parte visitante, Justo, García y Green eran los encargados de mantener a su equipo dentro del partido. Con un apretado 45-44 se llegó al descanso.

Los nazaríes salieron como miuras de los vestuarios, una gran acción de Coego, que finalizó el choque con 37 puntos, y tres triples consecutivos de Roberto Guerra ponían distancia de por medio y hacían soñar al Palacio de los Deportes con una victoria. El Mallorca se atascó intentando limar las diferencias a base de triples, pero el Granada seguía enchufado, llegando a alcanzar los once puntos de ventaja, 60-49. Aunque la alegría iba a ser pasajera, los lanzamientos desde la larga distancia devolvieron la igualdad al marcador, dejando la ventaja local es un mero espejismo.

A pesar de desperdiciar la renta conseguida durante unos minutos de inspiración, el Cebé no se descompuso y siguió trabajando en la misma línea. El Mallorca se amenazaba con romper el choque con la inspiración de Green y García, pero el corazón de los granadinos respondía cada acción del rival con una nueva canasta. Los últimos minutos se enfangaron con un carrusel interminable de tiros libres, los nervios hacían estragos en los lanzadores de ambos equipos, hasta que Ángel Hernández a falta de seis segundo, anotaba los dos tiros libres que llevaron el choque a la prórroga, 80-80

Los primeros cinco minutos de tiempo añadido comenzaron con un parcial de 0-5, que hacía planear el fantasma de una nueva derrota cruel. Pero el Cebé no podía permitir que la historia de una noche épica terminará en sufrimiento, Jesús Fernández anota un triple para devolver las tablas al electrónico y la defensa numantina de los verdirojos hizo el resto, cortando cualquier vía de anotación para los insulares, 88-88 y segunda prórroga.

Con las emociones y los nervios a flor de piel, los jugadores del Cebé se conjuraron para escribir un final a la altura del esfuerzo realizado. Subieron el telón del último actos con un parcial de 6-0 que enviaba a la lona a los mallorquines. Los triples de Guerra, Jesús Fernández y Ángel Hernández hicieron inútil la última intentona del Mallorca por llevarse la victoria, pero la gloria, aunque sea terrenal estaba reservada, en la noche de ayer, para los jugadores del Cebé.

Tras la victoria, la plantilla al completo se abrazó, salto y celebró junto a la afición como si de un título se tratara, pero sólo era una victoria, una victoria que supone el canto de cisne de un club, una plantilla y una afición que no quieren claudicar ante un destino cruel y doloroso.

CB GRANADA: Luis López (2), Roberto Guerra (24), Javi Hernández (2), Jesús Fernández (12), Manu Rodríguez (4), Ángel Hernández (11), José Coego (37), Edu Ruiz (8), Fede Ucles (0), Rai López (3).

LOGITRAVEL MALLORCA: Whippy Marques (9), Shaun Green (21), Josep Gaya (0), Joan Carles Bivia (14), Juan Cabot (0), Guillermo Justo (14), Miguel García (23), Pere Ferrer (0), Sergio Alonso (5), José Amador (8).

 
 
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