La pizarra de Josema
Ron con demasiado hielo
Estos partidos de navidad “dan buen rollo” …que si los peluches, que el ambientillo, los gorros de papa Noel…pero ayer tenía el aliciente de ver sobre el parqué a Jassel Pérez, el jugador dominicano repescado tras la lesión de Kjajic. Lo cierto es que demostró su descaro y su capacidad –también sus lagunas- pero insufló un golpe de aire fresco en una grada que parecía que ira al coliseo del zaidín con otras formas –lejos de las apagadas del día de Zaragoza-, pero…el quinteto inicial ya mostraba algo raro: Howard en la pista de inicio. El francés no está –no sabemos si se le espera- apático en ataque y defensa, especialmente en transición, muestra que, o abril desde el que no juega no es el de 2025…o su proceso de llegada va demasiado lento.
Lo cierto es que los pimentoneros –honor a una afición que se desplazó en masa callando en muchos momentos a la local- comenzaron mejor en los primeros cuartos, manejados desde el banquillo por un entrenador excelso: Sito Alonso, aún así, los de Ramón Díaz se iban reponiendo de los golpes como podían y le daban las fuerzas.
Mientras el “diésel” Thomas calentaba muñeca, Pérez y Bozic mantenían –a duras penas- la intensidad para contrarrestar al martillo pilón Raieste y Forrest –¡que pareja de jugadores ¡-
El tercer cuarto nos dejaba más ron dominicano…pero…el ron –con demasiado hielo- se acaba aguando. Pérez no está para asumir roles de líder, decidir en aclarados para él, o determinar en momentos cruciales. Thomas llegó y sumó sus puntos, Bozic sus faltas recibidas y Tunde su crecimiento brutal…de los demás? Hielo: Costa está en un momento en el que regala más que Papa Noel, Rouselle está mal (me cuentan que llegó a encararse con la grada), Brimah apenas jugó, Burjanatze suma solo minutos sin más y Durán y Tomás están –supuestamente- para calentar y el mate final en la previa del capitán…con este panorama, Granada decidió que- ya que no tiene centímetros para cargar el rebote ofensivo –llegó a estar 20 rebotes defensivos por 1 solo en ataque- era momento de cerrar el box out defensivo y a partir de ahí salir a campo abierto…pero el ron acabó “aguado” del todo y cuando Sito “el tranquilo” puso en orden a la tropa, especialmente en defensa, destruyó a los rojinegros a base de defensa.
El parcial de los últimos tres minutos fue brutal. Lo peor era ver a gente marchándose del pabellón “con el partido vivo” (77-80) y tres minutos por jugar…como si la confianza se hubiera ido por los sumideros del recinto. Lo de la conclusión habla bien a las claras de cómo está la cosa: o Alibegovic es Papa Noel o sus Majestades los Reyes Magos o el Grinch de la Primera FEB llegará antes que nos pongamos la ceniza en febrero…
Lástima…el ron tenía buena pinta¡¡¡ Buen comienzo de 2026 a tod@s.
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El entrenador del Covirán cree que llegaron justos en el final ante un equipo muy físico y con talento





