CONTRACRÓNICA | Trankimazin
La temporada del Granada se prevé no acta para corazones sensibles
Semanas atrás una noticia relataba como en el Reino Unido un programa piloto iba a permitir a los médicos recetar entradas para partidos de fútbol con la intención de luchar contra la depresión y la ansiedad, una medida que, a buen seguro, han tomado sin tener en cuenta los encuentros del Granada, que se han convertido en una montaña rusa de emociones.
En España, ningún facultativo coherente pescribiría partidos de los de Pacheta para templar los nervios de sus pacientes, algo que sería toda una temeridad, como se pudo comprobar en 'La Rosaleda', escenario donde los nazaríes firmaron una actuación no acta para aficionados con la tensión alta.
A los 20 minutos, con 2-0 en el marcador, muchos aficionados ya habrían arrojado la toalla al rincón rojiblanco, pidiendo la rendición de su equipo ante el vapuleo que estaban sufriendo ante un Málaga demoledor, que dejaba al descubierto todas las vergüenzas de un equipo en construcción y que con lo mostrado en esos primeros compases parecía carne de Primera RFEF.
Pero el fútbol no atiende a razones y lo que parecía abocado a una goleada local terminó siendo un ejercicio de supervivencia y redención de los rojiblancos, que gritaron a los cuatro vientos que este muerto está muy vivo y preparado para competir a pesar de los funestos pronósticos.
Lo que es evidente, es que esta temporada el Granada no se puede permitir sestear ni desconectarse si no quiere seguir coleccionando derrotas, es necesario esgrimir la mejor versión para poder luchar por las victorias y ahora falta que el equipo sea capaz de sostener lo ofrecido en la segunda mitad durante los 90 minutos para encontrarse con el primer triunfo del cuso. Vayan preparando los trankimazin y los desfibriladores.
Los de Pacheta mejoraron, en un ejercicio de supervivencia, la paupérrima primera mitad firmada en 'La Rosaleda' para igualar el partido
Sergio Ruíz y Rodelas fueron los más destacados de un Granada que sumó su primer punto de la temporada
