El Granada pierde el acento andaluz
Solo tres futbolistas de la plantilla rojiblanca han nacido en el sur
Hace no mucho, los andaluces eran mayoría en un vestuario rojiblanco que bombeaba sangre del sur, un núcleo con el que se consiguieron los mayores logros en la historia del Granada. Ese acento se ha ido diluyendo en las últimas temporadas y ahora solo quedan tres futbolistas que puedan celebrar el 28 de febrero comiendo pan con aceite.
Carlos Neva, natural del Puerto de Santa María, se llegó a quedar como el último 'superviviente' andaluz en el cuadro nazarí, actuando como nexo de unión entre el pasado reciente y el presente. Al gaditano se le unió por méritos propios Rodelas, que a pesar de contar con ficha del filial es uno más del primer equipo.
Canterano del Granada desde pequeño, Rodelas insufla al equipo ese sentimiento de pertenencia, alcanzando su sueño desde Alhendín, convirtiéndose en abanderado del granadinismo y del Granada, donde espera poder triunfar y tener una dilatada carrera defendiendo el escudo del equipo de su tierra.
En el mercado invernal, descartando opciones exóticas, el Granada apostó por Stoichkov que, a pesar de su apodo, es oriundo de San Roque, otro gaditano de pro que transmite el desparpajo y el 'salero' de esta tierra, jugando con ese descaro que otorga haberse criado con un balón entre calles estrechas y encaladas.
Desde la distancia también sentirá nostalgia Bryan Zaragoza, otra talento andaluz, criado en el Granada, que se marchó en busca de retos mayores, pero que sigue mirando de reojo a su tierra y que nunca ha escondido las ganas de regresar en un futuro, cuando los caminos le llevan a cruzar Despreñaperros en un viaja de regreso.
El balón echará a rodar en 'Los Cármenes' a las 18.30 horas
CONTRACRÓNICA | El Granada recuperó el pulso y mostró una intensidad muy diferente a la de partidos anteriores
