Raúl Fernández: "El equipo siempre ha estado unido"
"Ha habido mucho compromiso", reconocía el portero vasco tras recibir el VI Trofeo Paco Pedrosa al jugador más regular de la temporada
Raúl Fernández ha sido galardonado con el VI Trofeo Paco Pedrosa a la regularidad de GranadaEnJuego, un reconocimiento a su trabaj durante la temporada y que patrocina Mercury Motor 2.0.
"Es un honor. Regular es estar el máximo tiempo disponible, hacerlo lo mejor posible cuando te toca jugar y, por suerte, ha salido un buen año, con buenos partidos y ayudando al equipo”, dijo el meta vasco.
Una temporada en la que su papel parecía que iba a ser secundario, pero supo aprovechar la lesión de André Ferreira para reivindicarse y ganarse un puesto en el once. "En broma le digo a André que parece que nos hemos ido turnando, parecía que habíamos firmado un contrato para jugar uno u otro. Fuera de bromas, tocó así y yo estaba preparado, empezó jugando él, yo era uno más en el banquillo ayudando al equipo, este puesto es así, a veces tiene que jugar el otro por circunstancias, esta vez fue una lesión, intenté aprovecharlo y dar todo lo que tenía. Sabía que en el algún momento el trabajo iba a dar sus frutos”, dijo.
Y otra lesión, en su caso una fisura costal le obligó a no jugar durante el sprint final. “Sufriendo desde la grada, pero a veces te toca ayudar desde la grada, el banquillo o el campo. He intentado estar con mis compañeros, arroparles, darles muchos ánimos y vivirlo con ellos. Me ha hecho mucha ilusión ir en el autobús y vivir el ambiente que se ha creado”, apuntó.
“Ha sido una temporada bonita, pero también dura”
El curso ha finalizado de la mejor forma posible, pero el camino no ha sido sencillo. Para el cancerbero del conjunto rojiblanco, "ha sido una temporada bonita, pero también ha sido dura, ha habido fases difíciles, con cambio de entrenador, nos ha costado mucho ganar fuera de casa. Si algo ha tenido bueno el equipo es que siempre ha estado unido, hemos formado una gran familia dentro del vestuario, eso da resultados. Ese buen ambiente que hemos tenido siempre y habernos repuesto de las dificultades ha hecho que lleguemos al final con todas las opciones y en este último tramo los pequeños detalles han caído de nuestro lado”.
El Granada ha arrastrado durante meses una preocupante falta de fiabilidad como visitante, un hándicap que finalmente el equipo logró remediar. "Se intentó mejorar desde el juego, no había otra forma. Queríamos hacer mejor las cosas, es el resumen, queríamos llegar más a puerta, ser un equipo más atrevido, en definitiva, ser un Granada que quiere ser mejor que el rival, y en muchos casos lo conseguimos, algunas veces ganando y otras perdiendo", reconoció.
En el tramo final el equipo ha conseguido ser el más regular. "Ha sido muy importante. El equipo se ha mentalizado para lo que nos tocaba, sabiendo cómo estaba el contexto y lo que estaba costando ganar. Si entraba un jugador u otro todos daban un buen nivel y creo que esa ha sido la clave este año, siempre ha habido buenos jugadores que han entrado y han respondido muy bien", afirmó.
“Hemos cumplido”
Raúl Fernández ha firmado una temporada sobresaliente, aunque con algún lunar como la expulsión ante en Leganés. El meta comentó que "lllegaba el míster nuevo, todos teníamos ganar de querer agradar, esa ansiedad porque se cambiaba la forma de jugar, queríamos acostumbrarnos a lo que nos pedía el míster y fue una jugada que se puede dar en el fútbol, pero a partir de ahí fue un rendimiento muy bueno. También pasé momentos complicados como la factura en la cara, que es algo incómodo jugar con la máscara, pero al final orgulloso de mirar para atrás y ver que ha merecido la pena”.
Y para elegir el instante inolvidable del curso, Raúl Fernández no tiene dudas. "El mejor momento ha sido hace poco, cuando pitó el árbitro el final y todos dando saltos, abrazándote con tus compañeros con los que has compartido tantos meses, victorias, derrotas y esa incertidumbre de no saber lo que pasará, y ver que al final se ha podido conseguir, ahí todo el mundo suelta el aire y por fin nos damos esos abrazos que te hace ver que hemos cumplido”, dijo.
“Creía que podía encajar en el Granada”
En esta segunda etapa como rojiblanco, Raúl Fernández ha podido vivir otro ascenso, algo de lo que muy pocos jugadores pueden presumir. Fernández recordó que "fue una temporada muy bonita en la que también conseguimos el ascenso. Es verdad que en la última parte tampoco jugué, esta vez fue por cuestión técnica ya que jugó José Juan, pero el recuerdo es que jugué muchos partidos, con las gradas de 'Los Cármenes' casi llena en Segunda División B que era muy complicado, y eso llamaba la atención, el ambiente que había daba esa ilusión, y ahí empezó este Granada que conocemos, se ha dado un cambio radical y es un gusto poder vivirlo”.
En verano, llegar al Granada casi fue una obsesión para el bilbaíno. "Tenía un año más de contrato en Las Palmas, había pasado allí ya cuatro años, creía que también era el momento de salir, y si salía era para ir a un sitio que superase o igualase donde estaba. Vi la opción del Granada, había descendido, le faltaban porteros, vi los equipos que había y creía que podía encajar aquí. A base de insistir y de algunos contactos que tengo me han echado un cable y creo que hemos salido ganando todos”, señaló.
La relación entre Raúl Fernández y André Ferrerira ha sido clave. "Nos llevamos estupendamente. Desde el inicio hemos conectado bien sabiendo que es una relación profesional, él entiende tanto como yo el puesto de portero, al final el que juegue uno u otro no es cuestión de mi compañero, es cosa del entrenador, y si algún día me toca estar enfadado será con el míster, no con mi compañero. Hemos creado ese vínculo, nos hemos ayudado, hemos subido el nivel los dos porque nos hemos exigido”.
“El Zamora es de todo el equipo”
Como colofón a su gran temporada, Raúl Fernández ha obtenido el Zamora como el portero menos goleado de la categoría. Para el cancerbero, "no es algo que vas buscando, el objetivo principal es ascender, pero ya que está pues vamos a recogerlo, comenta entre risas. Es una consecuencia de todo el trabajo, quiere decir que el equipo lo ha hecho muy bien, para subir a Primera no vale sólo con atacar, hay que saber defender y esa ha sido la clave, siempre ha habido mucho compromiso, la gente ha presionado desde arriba para que al rival le costase llegar a nuestra área. Todo ese trabajo ha llevado al Zamora, se le da a una persona, pero ha sido de todo el equipo”.
Echando la vista atrás, no hay duda de que Raúl Fernández ha sido pieza clave en el ascenso, aunque él lo ve con modestia. “Nuestro puesto es así, intentamos ayudar. Hay días en los que estás más inspirado, otros menos, pero siempre he intentado dar lo mejor de mí, tomarme cada día con ilusión, como una oportunidad de poder seguir disfrutando del fútbol, y la verdad es he disfrutado mucho, había semanas en la que no encajábamos, parecía que era imposible hacernos un gol y yo me sentía muy arropado” apuntó.
Con la consecución del Trofeo a la regularidad, Raúl Fernández toma el testigo de otros grandes porteros que han pasado por el Granada como Roberto, Rui Silva o Maximiano. “Es un honor, son grandes porteros, los conozco a todos, han llegado a equipos importantes. Con ganas de seguir creciendo, no conformarme, quiero seguir creciendo como portero, ahora tenemos una nueva ilusión todos y por qué no poder mejorar registros y estar muchos años en Primera”, dijo.
Ahora, el reto para Raúl Fernández es seguir defendiendo la portería del Granada en Primera porque "esa es mi ilusión, cuando uno va a entrenar todos los días sueña con jugar en Primera, ahora que estás ahí hay que asentarse, que también es difícil y seguiremos por el mismo camino con trabajo e ilusión”.
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La finalidad es trasmitir cómo los valores que ensalza el fútbol han sido un mecanismo de generación de paz y bienestar