Un "sí, quiero" en un escenario "más especial que el Mirador de San Nicolás"
Sergio y Rocío, dos aficionados rojiblancos, protagonizaron la pedida de mano más granadinista posible sobre el césped del Nuevo Los Cármenes
La Torre Eiffel, los canales de Venecia, la Fontana di Trevi… Son algunos de los lugares más habituales en los que las parejas fructifican su amor con el tan deseado “sí, quiero”. En Granada, el Mirador de San Nicolás suele ser también escenario de ello. Sin embargo, para los protagonistas de la siguiente historia existe un rincón mucho más especial.
Sergio y Rocío son dos seguidores rojiblancos que el pasado sábado comenzaron a hacer planes de boda porque a él se le ocurrió la maravillosa idea de hincar la rodilla. Y ese ritual, necesario para festejar posteriormente cualquier casamiento, tuvo al ‘Nuevo Los Cármenes’ como sede idílica.
Estos dos aficionados, cuyo momento se hizo viral en redes sociales entre la comunidad del Granada CF, hablaron con Granada En Juego en las horas previas al partido frente al Albacete, menos de una semana después de aquella mágica escena y todavía “sin creérnoslo, seguimos nerviosos por todo lo vivido”.
Para conocer su afición por el equipo nazarí, él explicó que “somos abonados desde hace muchos años, aunque de forma intermitente, dependiendo de las circunstancias. Eso sí, aficionados, desde siempre. Recuerdo aquel partido del ascenso ante el Guadalajara, todavía tengo un trozo de césped guardado de aquel día”. Por otro lado, ella comenzó a sentir la pasión rojiblanca “por él. Ya vine al estadio siendo mucho más joven, pero lo que es impregnarme del Granada, a partir de conocerle a él”.
Sergio argumentó cómo se dio todo lo que finalmente sucedió: “Ella podía pensar en sitios más típicos, como París, El Rocío, Praga… Sin embargo, quería sorprenderle. Al estar tan ligados al Granada, que es de las pocas cosas que tenemos en común, se me ocurrió a comienzos de verano hacerlo en ‘Los Cármenes’. Vi la opción de los tours y a partir de ahí lo gestioné a través del club. Con el paso de los meses, se forjó la idea y todo salió genial”.
“No fue un tour como tal, sino algo ficticio. Había familiares y amigos en la grada, lo planificamos todo con la intención de que ella no sospechara. Al saltar al campo, se mostraron imágenes en el videomarcador, sonó música… y Rocío ya sabía que había hincada de rodilla” añadió, asegurando que “estaba completamente seguro de que la respuesta sería sí. De lo contrario, no me hubiera molestado tanto por el riesgo a terminar mal”.
En ese momento en el que Sergio tomó la palabra con la roda hincada, Rocío reconoció que “sentí mucha vergüenza en aquel momento, y no dejaba de llorar. Todo empezó como un día normal y acabó así”.
“Hasta donde tenemos entendido, sí se habían hecho algún tipo de reportajes fotográficos, pero pedida de mano como tal creemos que nunca ha habido. Por tanto, somos pioneros” comentaron ambos seguidores, quienes no cierran las puertas a más sorpresas en el gran día de la boda: “No se puede decir porque si no, no sería sorpresa. Por poder, cualquier cosa puede pasar”.
El colegiado balear pitará por segunda vez, en la presente temporada, al Granada CF como visitante