Uno a uno: Lucas Boyé, el imprescindible nazarí
El argentino dio un paso al frente tras la salida de Uzuni y cuajó su mejor temporada a nivel anotador desde que está en el Granada CF
Nadie iba a pensar, al inicio de la temporada, que Myrto Uzuni iba a abandonar el Granada CF en el mercado invernal y que sería Lucas Boyé el responsable de tomar la responsabilidad goleadora del Granada. El argentino, que venía cumpliendo un papel de generador de juego y espacios en el ataque rojiblanco, tuvo que reinventarse tras la marcha de Uzuni y se desató de cara a portería anotando diez goles en una temporada prácticamente sobresaliente a nivel individual para el atacante argentino.
Boyé, que ha ejercido de capitán tanto dentro como fuera del campo a pesar de la regularidad que ha mostrado y de que él ha sido uno de los pocos futbolistas sobresalientes del Granada durante toda la temporada, comenzó con cierta irregularidad la temporada. El argentino, que no conectaba en la idea de juego de Guillermo Abascal, no destacó durante la etapa del sevillano en el banquillo granadinista llegando a ser suplente en el debut liguero ante el Albacete y también en el choque en casa ante el Deportivo de La Coruña.
El cambio de técnico, con la llegada de Escribá al banquillo nazarí, pilló a Boyé recuperándose de una contusión costal, por lo que no reapareció con el equipo hasta el duelo frente al CD Mirandés en 'Anduva', donde jugó cerca de media hora. Desde entonces, Boyé fue indiscutible para un Fran Escribá que hizo al argentino una pieza fundamental en su idea de juego, apoyando su esquema y el juego ofensivo en una figura como Lucas Boyé que se volvió imprescindible. La goleada ante el Tenerife en el 'Nuevo Los Cármenes' sirvió a Lucas para estrenarse como goleador, una losa que arrastró hasta el mes de octubre pero que desde entonces se desquitó de buena manera.
Molestias físicas volvieron a apartar a Lucas Boyé del equipo en los meses de noviembre y diciembre cuando parecía que el argentino comenzaba a ser un hombre decisivo y el socio perfecto de Uzuni en el ataque nazarí. Su reaparición, ya en enero, se dio tras la salida de Uzuni del equipo y con la necesidad de dar un paso al frente en el aspecto goleador ante la falta de refuerzos y la incapacidad de Stoichkov de ver puerta. Tres goles y una asistencia en los seis primeros partidos 'post Myrto' fue la carta de presentación de un Boyé que parecía jugar más liberado sin el albanés, con mayor capacidad de movimiento, y que se echó el equipo a la espalda manteniéndolo durante esas semanas de incertidumbre en la pelea por los puestos de ascenso gracias a sus goles.
Sin duda que los mejores meses del argentino fueron los de marzo y abril, donde Lucas Boyé tuvo una influencia brutal en el equipo materializando cuatro goles y dos asistencias en ocho partidos. Unos meses, probablemente los mejores del equipo, con Escribá al frente del Granada, desde la salida de Uzuni en los que el cuadro rojiblanco sumó 16 de los 24 puntos posibles en esos meses.
Otros jugadores, como Tsitaishvili o Abde, dieron un paso al frente en el tramo final de competición y el ariete argentino bajó sus prestaciones goleadoras anotando solamente un gol en el último mes liguero aunque, a pesar de ello, siguió siendo un fijo para Pacheta, que sustituyó a Escribá en el cargo de entrenador, por todo lo que Lucas Boyé aporta al cuadro rojiblanco tanto en ataque como a la hora de sacar el balón jugado y construir espacios.
Una temporada muy buena del atacante rojiblanco, la mejor en el aspecto goleador donde alcanzó la decena de goles, a pesar del fracaso colectivo que, si algo hace ver, es la importancia y lo imprescindible que es Lucas Boyé en este equipo a un buen nivel. Con verano por delante y muchas 'novias' en el mercado que buscan seducir al argentino, los rojiblancos deben hacer un esfuerzo por retener al que probablemente sea su mayor valuarte de cara a la próxima temporada.
Los de Pacheta se medirán al conjunto armero a partir de las 19:30 horas
El extécnico del Recreativo Granada ha analizado para GranadaEnJuego al último fichaje rojiblanco, al que tuvo a sus órdenes