Uno a Uno: Granada CF 1-1 UD Almería
Myrto Uzuni con su gol fue de lo poco reseñable de un muy mal partido
Augusto Batalla (5).- No tuvo prácticamente trabajo en todo el partido, ya que las claras ocasiones del rival no necesitaron de sus intervenciones. Su primera parada fue en el minuto 68, y eso si, luego salvo el gol rival ya con el 1-1 en el marcador tras parar con el pecho un mano a mano de Pozo.
Ricard Sánchez (4).- Volvió el Ricard alocado en ataque y frágil en defensa. No apareció el Ricard que jugó frente al Barcelona solo hace una semana. Se muestra más cómodo con linea de tres centrales y actuando como carrilero.
Piatkowski (4).- Volvió a la titularidad y no ofreció sensaciones positivas. Parece grande y pesado en defensa, pese a algún cruce salvador, y en ataque a balón parado estuvo torpe en el remate.
Miguel Rubio (4).- Con la baja de Ignasi Miquel, el técnico prefirió colocar en el flanco izquierdo a Rubio por delante de Torrente y evidentemente el equipo lo noto en la salida del balón desde atrás, que fue siempre inocua y falta de precisión.
Carlos Neva (4).- Volvió a la titularidad y se mostró intrascendente, cumplidor atrás pero sin acciones ofensivas, tan necesarias en el día de ayer. Temporada muy floja la suya hasta el momento. Solo destacar una gran acción defensiva tras una gran carrera.
Martin Hongla (4).- Su actuación ayer fue el reflejo del equipo, partido soberbio hace una semana y totalmente perdido ayer. Incluso un error suyo en el minuto 9 propició el gol rival. Es malo ilusionarse con ningún jugador, es malo ilusionarse con el equipo.
Sergio Ruiz (5).- A años luz del Segio que venía jugando últimamente. No fue de los peores, pero no fue el faro al que agarrarse. Una pérdida suya provoco la jugada polémica entre Batalla y Pozo que pudo ser penalti.
Gonzalo Villar (3).- No se sabe si sigue deprimido por el cese de Páco López, si está en una baja forma alarmante, o si el técnico no sabe sacar de él su máximo rendimiento, o quizás las tres cosas a la vez, pero no parece ni la sombra del Gonzalo Villar de hace unas jornadas. Jugó 33 minutos, y pudieron ser menos, ya que su amarilla del minuto 3 pareció roja, o la menos naranja.
Oscar Melendo (3).- Parece que no ha aprovechado la oportunidad que le ha dado el técnico. No tuvo peso en el juego del equipo, y junto a Sergio y Gonzalo vio como la medular rival les pasaba por encima.
Pellistri (5).- Lo intenta todo, pero ayer no estuvo con la chispa de Barcelona. Tuvo el empate en una ocasión clarísima que saco la defensa rival, y otro remate franco que se fue muy desviado con su pierna mala. Aún no haciendo un buen partido, parece imprescindible en este equipo.
Myrto Uzuni (6).- Como en otros partidos volvió a tener una clara ocasión a comienzos del mismo que marró lastimosamente. Después peleó como siempre, y marcó el gol del empate en una buena acción comenzada por Gumbau. Marcó y peleo, poco más se le puede pedir, si acaso, que marqué las que tiene al comienzo de los partidos, quizás así, la fortuna cambie.
Maouassa (4).- Al contrario que en Barcelona, volvió a parecer que le faltaba fuelle. No acertó ni con las jugadas a balón parado. Fue sustituido en la segunda parte.
Lucas Boye (5).- No es un goleador, pero su presencia es indispensable para este Granada. Su juego de espaldas, su "cuerpeo" con los defensas rivales y su visión de juego le hace ser indiscutible titular. Uno al cual agarrarnos.
Gerard Gumbau (5).- Personalmente le esperaba en el once inicial. Cuando salió al campo demostró que debería de haber estado en el mismo, dando al centro del campo algo de criterio y asistiendo a Uzuni en el gol.
Antonio Puertas (s.c.).- Poco tiempo para hacer nada.
Jozwiak (s.c.).- Quizás debió de salir antes.
Alexander Medina (4).- Sin ánimo de ser ventajista, esperaba a Gumbau de titular, y poner a Villar en banda ya sabemos todos que es inútil, pierdes dos jugadores, un gran futbolista por dentro y otro futbolista especialista en banda. Quizás debió de arriesgar con Torrente....Lo que es evidente es que el equipo jugo un horroroso primer tiempo, y aunque la gran mayoría de la culpa sea de unos jugadores que salieron al campo nerviosos como colegiales, es cierto que ni el planteamiento ni el once inicial elegido parece que fueron acertados. El rival fue superior casi siempre, y eso jugando contra el colista, jugándote la vida, y con un campo lleno y una afición volcada dice poco, muy poco de los nuestros. Paso un tren, quizás el último.
