OPINIÓN: Objetivos no cumplidos, realidades diferentes, por Jaime Lucena
Si algo tienen en común los equipos de mis amores, el Granada CF y el CB Granada, es que ambos han fracasado sin excusas en sus objetivos, y en el caso del segundo, el fracaso podría ser mayúsculo. Quizás aquí se acaben las semejanzas entre ambos, ya que el pasado, el presente y el futuro de ambos no puede ser más diferente.
En cuanto al pasado del CB Granada, el equipo puede hacer bandera de una gestión impecable, con algunos errores, pero impecable al fin y al cabo. Se han confeccionado presupuestos serios y realistas, manteniendo unas excelentes relaciones con la Administración granadina y con el tejido empresarial de la ciudad. De esta manera, la afición siempre ha premiado esta buena gestión llenando casi cada partido el aforo del Palacio.
El pasado de nuestro equipo de fútbol no ha podido ser más diferente. Desde que tengo uso de razón, la horrorosa gestión de un presidente, hacia buena la gestión del anterior presidente, que nunca había sido buena, quizás menos mala, y así año tras año.
Deportivamente el CB Granada está instalado en la élite de la segunda mejor liga del Mundo, mientras que el Granada CF ha estado en las catacumbas de la Tercera División, y ahora, y un año más por lo menos, está en el sótano de la Segunda B. En cuanto al presente del baloncesto, y gracias a los años de buena gestión, este parece garantizado, y eso que este año, y por la crisis económica por la que está atravesando nuestro País, parece que algunos pagos se están retrasando.
En cuanto al fútbol en Granada, se vuelve a abrir una puerta para la esperanza, parece que con unos nuevos gestores serios, pero cuyo éxito en su gestión no está ni mucho menos garantizado, ya que tienen que lidiar con una deuda histórica descomunal, producida por esa serie nefasta de mandatarios que ha sufrido el equipo, y por tener que lidiar también con esa crisis económica nacional, que hace que tanto a empresas como a particulares les cueste mucho rascarse el bolsillo. Deportivamente hablando, y después del partidazo de Cádiz, que hizo que todos nos ilusionásemos con la posibilidad de alcanzar la cuarta plaza, los partidos ante el Marbella y el Ejido nos han colocado definitivamente en tierra de nadie, lejos del ascenso pero sin agobios por el descenso. En cuanto al baloncesto, nuevo ridículo de nuestro equipo en Fuenlabrada, que hace que el mismo este metido de lleno en la lucha por el descenso. Yo, viendo como está el equipo, confió mucho más en que los de atrás no sumen victorias, y en que al final únicamente descienda uno, que en nuestro propio equipo, a quién veo incapaz de ganar a nadie. Y desgraciadamente esto ni es una exageración ni es fruto de la frustración, sino el análisis de la realidad.
Para el futuro, necesito ser optimista con el fútbol. Espero y deseo que el Granada CF pueda salir adelante, con el trabajo de la nueva directiva y las aportaciones económicas de Instituciones Públicas, empresarios y particulares, estos a través de los nuevos carnets, y que se salga a ganar los 6 partidos que faltan, para no terminar de desilusionar a la afición, y poder apurar las opciones de entrar en la Copa del Rey.
En cuanto al basket queda rezar, esperar que se tomen medidas para que el equipo no descienda, que al final de temporada se prescinda de cuatro o cinco jugadores, que por las razones que sean en Granada no van a aportar mucho más, y que los desajustes económicos se solucionen y pueda conformarse otra plantilla para la temporada que viene que ilusione, y haga que el Palacio se llene de nuevo jornada tras jornada.
El próximo lunes comenzará el segundo y último turno del campamento de verano del Coviran