La amistad no entiende de fiestas
El Granada evitó la clasificación del Cádiz al Play Off en 2018, mientras que el cuadro amarillo retrasó hasta Mallorca el ascenso rojiblanco de 2019
Granada y Cádiz siempre han sido clubes a los que une una amistad especial, sobre todo por el buen rollo que transmiten sus aficiones, latente en cada derbi que disputan. Una hermandad que, cuando el árbitro señala el inicio del partido, se olvida y los equipos defienden, como es lógico, sus intereses. Algo que este lunes detonará una batalla por la permanencia, y que en los últimos años se ha reflejado de sobremanera.
El 2 de junio de 2018, Granada estaba preparada para vivir una fiesta… del cadismo. El `Submarino amarillo´, en la segunda temporada en la categoría de plata tras su retorno al fútbol profesional, afrontaba la última jornada del campeonato dependiendo de sí mismo y repetir clasificación en el Play Off de ascenso. Una marea gaditana se desplazó hasta la ciudad de la Alhambra con la esperanza de que el rival nazarí, sin nada más que la honra en juego, no apretara demasiado el acelerador. Un estelar Darwin Machis deshizo el sueño del conjunto de Álvaro Cervera y los rojiblancos se llevaron el duelo por 2-1. Los resultados no acompañaron para un Cádiz que vio, incrédulamente, como se quedaba con la miel en los labios.
A la temporada siguiente, el Cádiz se tomó la “revancha” y el 26 de mayo de 2019 fueron los amarillos quienes silenciaron el ‘Nuevo Los Cármenes’ y aguaron la fiesta local. Lleno a reventar, el coliseo del Zaidín se disponía a celebrar el ascenso a Primera División si se conseguía el triunfo. La cosa se puso todavía más de cara cuando Rodri adelantó al equipo de Diego Martínez a los doce minutos. Pero, jugó con fuego el cuadro nazarí, no sentenció y Ager Aketxe, a falta de un cuarto de hora, puso las tablas. El regreso a la máxima categoría se retrasó hasta Mallorca una jornada después, lo que evitó a miles de granadinistas festejarlo en el momento junto a sus ídolos.
Ya en LaLiga Santander, Granada y Cádiz han seguido sin regalarse absolutamente nada. El curso anterior, el `Submarino´ selló prácticamente su permanencia a falta de cuatro jornadas en el ‘Nuevo Los Cármenes’ gracias a una victoria por la mínima que deshizo las esperanzas europeas del conjunto rojiblanco. Y, en la primera vuelta, con el ‘Nuevo Mirandilla’ casi celebrando el primer triunfo de su equipo en casa (cosa que aún no se ha producido), Jorge Molina marcó en el minuto 88 el 1-1 definitivo.
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El técnico tiene a su disposición a seis jugadores para utilizar en la zona central del campo
La idea del club es ser más accesible para su masa social