El Covirán cae con mucha dignidad en Málaga, 95-78
El equipo rojinegro manda en el marcador durante más de treinta minutos pese a las bajas, pero el Unicaja le pasa por encima en el último cuarto
El Covirán Granada no pudo derribar la lógica y cedió ante el Unicaja por 95-78, si bien ofreció una gran imagen pese a las adversidades con las que afrontó el partido y estuvo por delante en el marcador durante más de treinta minutos. Mandó en los tres primeros cuartos gracias a una buena defensa y mucho acierto en las acciones de ataque. El equipo rojinegro se esforzó hasta la extenuación y sacó fuerzas de flaqueza para tapar de alguna forma su debilidad en las rotaciones. Lo dio todo, pero llegó ya al último cuarto con las fuerzas muy justas y ya no pudo sostener ese esfuerzo para plantar más cara a un rival de gran potencial. El último cuarto lo perdió por 26-7 y lo peor fue la lesión de Agustín Ubal en los últimos minutos, que podría conllevar otra baja más para la siguientes jornadas.
Sorprendente resultó el inicio del equipo granadino. Jugó con mucho desparpajo y dispuesto a darlo todo pese a las limitaciones con las que se presentó en el Martín Carpena. Estuvo duro en defensa y aplicó dinamismo en ataque para sorprender. Bamforth puso el 0-5 al anotar un tiro de tres. A gran nivel estuvo al principio Rubén Guerrero. Fue capaz de capturar rebotes en ataque y hacer también puntos. Tres triples consecutivos otorgaron la máxima renta para el Covirán (6-18). Los buenos movimientos en ataque de dentro para afuera le dieron resultado. Pablo Pin decidió optar por un quinteto más alto con el paso del tiempo y colocó a Ndiaye de '3'. Con el 15-21 pidió tiempo muerto Ibon Navarro. Al ser escasa la rotación al estar también sin ser utilizado Valtonen, el técnico granadino dio entrada al joven Medal durante unos minutos. Ubal se multiplicó y estuvo muy fino al hacer puntos y coger rebotes para dar el 18-27. Los visitantes se colocaron en zona y llegaron al final del primer acto con un favorable 21-27.
Despertó el Unicaja en el inicio del segundo cuarto. Un lanzamiento de tres de Otsekowski llevó al empate (27-27). El conjunto rojinegro comenzó a acusar la escasez de rotaciones y se vio a algunos jugadores algo más cansados. Pese a todo, la lucha fue constante y eso permitió capturar rebotes en ataque para contar con segundas opciones para anotar. Un triple de Noua concedió el 29-34 para ponerse otra vez por delante en el marcador. Pin pidió tiempo muerto con 31-34, más bien para dar un poco de respiro a sus jugadores, que se estaban multiplicando en la pista. El Unicaja se precipitó mucho en ataque y eso le vino bien al Covirán para mantener la renta. Noua anotó una canasta para dar el 36-44. Poco después vino otro parón por parte del técnico granadino para dar indicaciones a los suyos. Pese a las ausencias para encarar este partido, al descanso se llegó con un sorprendente 43-48.
No bajó el nivel el equipo granadino en el tercer periodo. Recuperó energías y entró fuerte. Bamforth firmó un 2+1 para poner el 43-51. Rousselle anotó poco después para alcanzar sus 1.000 puntos en la ACB. Bamforth siguió a lo suyo y con un lanzamiento de tres llevó al 49-56. El Covirán firmó muy buenos minutos y con un mate de Ndiaye tras asistencia de Rousselle dio el 52-61, una ventaja que aumentó después hasta el 52-64 con el triple de Pere Tomás. Pablo Pin devolvió la zona para defender, aunque vino una falta antideportiva de Rousselle sobre Alberto Díaz, que cortó el ritmo. Ndiaye volvió a convertir un triple para poner el 59-68. Sin embargo, el Unicaja volvió a apretar para reducir la distancia al 63-68, lo que conllevó un tiempo muerto del técnico granadino para frenar la intensidad local. A partir de ahí apretó más el Unicaja y fue capaz de rebajar la renta con un tiro de tres de Osetkowski, que puso el 69-71 con el que acabó el penúltimo periodo.
En el inicio del último se vio por debajo en el marcador el Covirán por primera vez en el partido. Taylor puso el 72-71. Llegaron otras dos canastas más del Unicaja para aumentar esa renta y con el 76-71 Pablo Pin pidió un tiempo muerto. El conjunto malagueño aumentó su intensidad en defensa y eso creó más dificultades para anotar. Las fuerzas se difuminaron en ese último periodo. Se acabó el acierto al apretar mucho atrás el conjunto malagueño y los puntos aparecieron con cuentagotas. Un triple de Carter dio el 87-75, lo que trajo otro tiempo muerto del entrenador granadino. El partido empezaba a irse. Pablo Pin optó por dar otra vez minutos a Medal. La peor noticia llegó con Agustín Ubal, al que le cayó encima de su rodilla derecha un jugador del Unicaja y ya no pudo continuar. Se tuvo que ir de la pista sin poder apoyarla en el suelo. Tras este percance bajó la intensidad y la derrota cayó por su propio peso.
Ficha técnica
UNICAJA MÁLAGA: Perry 16, Kalinowski 3, Ejim 0, Kravish 4 y Barreiro 6 (quinteto inicial), Osetkowski 16, Balcerowski 2, Taylor 7, Alberto Díaz 4, Carter 8, Djedovic 6 y Tillie 23.
COVIRÁN GRANADA: Rouselle 11, Bamforth 16, Tomás 3, Noua 22 y Rubén Guerrero 5 (quinteto inicial), Ubal 12, Iván Aurrecoechea 1, Ndiaye 8 y Medal 0.
PARCIALES: 21-27, 22-21 (43-48, descanso), 26-23 y 26-7.
ÁRBITROS: Carlos Cortés, Alberto Sánchez y Guillermo Ríos. Sin eliminados por faltas personales.
INCIDENCIAS: Partido de la vigésimo segunda jornada de la Liga Endesa disputado en el Palacio de Deportes José María Martín Carpena de Málaga ante 9.691 espectadores.
Los jugadores del Coviran competirán con nombres como los de Juan Núñez, Mario Saint Supery o Hugo González
Los de Pablo Pin quieren mantener vivas sus esperanzas de salvación