MINUTO 28
Hay que puntuar
Frente al Madrid el equipo ha vuelto a demostrar dónde tiene su punto fuerte y de qué forma debe explotarlo. Afrontamos una segunda vuelta donde algunos de los refuerzos invernales parecen bastante involucrados y conscientes de lo a que han venido y esperemos que así sigan. Estas cuestiones y el sabor agridulce de boca tras la derrota dominical, deja abierta la puerta de la esperanza otra vez.
Este Granada de Sandoval no es nada sin una exigente intensidad y concentración durante los noventa minutos de cada choque. Las evidentes faltas de calidad y técnica que hemos demostrado en muchos de los partidos de la primera vuelta, sólo se han revertido en momentos puntuales a base de pundonor, derroche físico y una gran solidaridad entre líneas en las distintas fases del juego. En cuanto este Granada desacelera, se relaja o cree tener un partido dominado, comienzan los problemas. Así llegaron los dos goles del Madrid y prácticamente todos los que nos han hecho.
Y como el fútbol tiene memoria de pez, ya llega el siguiente envite. En tierras vascas, frente a la Real, que viene de meterle cinco al Español en Cornellá y gustándose cada vez más. Nosotros llegamos penúltimos y con la presión que supone verse ahí. Suelen los equipos modestos recibir correctivos tras haber hecho buenas actuaciones contra los cocos, es como si se llegara más relajado de la cuenta. Traicionados por un subconsciente que cree pan comido parar a un extremo vasco por el que los niños no sueñan con hacerse fotos, viniendo de haber estorbado y mucho a cualquiera de los blancos de la galaxia.
Ahora toca ponerse el mono de trabajo, remangarse y currarse los puntos. Ya ha pasado ese escaparate mundial que es jugar contra el Madrid, ya nos hemos lucido y mostrado a los televidentes de los cinco continentes. Toca apretar y dar la cara por lo doméstico; por el Granada, por la ciudad y por los granadinistas, pero sobre todo fabricar puntos y salir de ahí abajo en la tabla cuanto antes y que sean otros los que se pongan nerviosos. Dar una buena imagen en los dos encuentros de esta temporada contra los madridistas será muy reconfortante, pero no nos sirve para no bajar a segunda. Hay que repetir una buena actuación en Anoeta, hay que puntuar, hay que ganar. A estas alturas las exigencias han bajado lo suficiente entre los aficionados como para sólo conformarse con ver ganar al Granada como sea y salvarnos una temporada más. La sombra de la palabra descenso es alargada, su materia pesada y deshacerse de ella difícil. Cuanto antes se vaya mejor. Ya habrá tiempo para otras cosas que repasar de esta temporada que haberlas haylas.
@MartosMS
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