ONCE INICIAL
Gijón: Creer o despedirse
La derrota en Leganés después de un partido impropio de un equipo que se jugaba la vida, junto con la derrota quizás previsible en casa frente al Atlético, unido a otros resultados de nuestros rivales más directos en la lucha por no descender, hace que el partido en Gijón sea, utilizando un tópico muy manido, a vida o muerte. No hay otra.
La situación en la tabla está muy complicada, y el único rival a priori que bajo mi punto de vista era susceptible de ser alcanzado por los nuestros, el Leganés, sigue sumando y alejándose de nosotros. Nunca vi, y lo he dejado escrito varias veces, al Deportivo como un rival en nuestra batalla. Creo que tienen un gran equipo y ahora, además con Mel están obteniendo los resultados que antes por verdadera mala suerte no conseguían. Su última victoria frente al Barcelona viene a demostrar que están dos o tres pasos por delante de nosotros. De igual manera, y a pesar de sus actuales malos momentos, tampoco veo a Málaga y Betis emparejados con nosotros, aunque en fútbol todo es posible.
Es por ello que cada vez que pienso en el partido de los nuestros frente al Leganés, la rabia y la incredulidad me atacan. Y es que sigo sin comprender el horroroso partido jugado en Butarque cuando, creo que literalmente la vida deportiva nos iba en dicho partido. Lamentable.
Por ello, la situación es dramática, y por ello el ganar en Gijón se hace imprescindible. Si el equipo sale al Molinón como lo ha hecho en Eibar, Bilbao o Leganés, será del todo incomprensible. No es un partido para especular, es un partido para ganar, y para salir a ganarlo desde el primer minuto. El rival así lo va a hacer, ya que se juegan igualmente la vida como nosotros, y como no pongamos en el césped como mínimo las mismas ganas y actitud que ellos pongan, además de perder dicho partido, sería que los nuestros ni pueden, ni quieren. Dan igual nuestras bajas, ellos también las tienen. Es un partido en el que no deben existir excusas.
Del partido perdido frente al Atlético se pueden decir varias cosas, como que los nuestros le pusieron ganas y actitud, que lo intentaron en todo momento, que lo más justo hubiese sido el empate, que no es lógico dejar sin marca en nuestra área pequeña a un tal Griezman, y que la lesión de Ramos y la expulsión de Wakaso fueron dos noticias muy malas para el equipo. Se puede decir todo eso, pero lo que es innegable es que no se puntuó, y que cada vez restan menos partidos donde sumar y recortar distancias con nuestros rivales.
Para finalizar, el equipo B se trajo una muy buena victoria de Marbella, y los chicos del basket cosecharon una sufrida victoria fuera de casa ante un rival inferior, que hace que su lucha por el primer puesto siga a su alcance. Interesantes jornadas se avecinan.
El conjunto entrenado por Jagoba Arrasate únicamente ha vencido en dos ocasiones al Granada CF en su casa
