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Jaime Lucena  |  16 de noviembre de 2017
Jaime Lucena (GRJ)
Jaime Lucena (GRJ)

El objetivo era, es y será muy complicado

 

Más de una vez he dejado por escrito que esta categoría es muy canalla y difícil, y que a nadie le pudiera sorprender que el colista de la misma pudiera imponerse en casa del líder. Me fastidia que dicha teoría de la cual estaba y estoy convencido la hayamos sufrido en nuestras propias carnes perdiendo en nuestro propio feudo con el colista. Si es una sorpresa, pero no un cataclismo inesperado, parecidas a esta se verán muchas a lo largo de la temporada.

La diferencia entre los equipos no es mucha, y basta con no tener un buen día y no disfrutar de esa pizca de suerte necesaria para poder caer ante cualquier rival. Y eso les paso a los nuestros frente al filial del Sevilla, que no estuvieron tan finos como otras veces, recibiendo dos goles totalmente evitables, y que la fortuna no termino de acompañarnos, ya que ocasiones hubo para adelantarse en el marcador, pero se pasó de en 2-1  a un 1-2 que ya no se pudo levantar.

Creo que no hay que alarmarse por el resultado, es verdad que se trata de un tropiezo inesperado, pero veo al equipo lo suficientemente centrado para que este revés no les afecté más allá de lo necesario. Lo que tiene que hacer el cuerpo técnico es poner a los jugadores el video del partido para incidir en los errores cometidos e intentar que los mismos no se vuelvan a repetir, y asegurarse que jugadores como Chico o Víctor Díaz, por poner solamente dos ejemplos, vuelvan a su nivel normal, y destierren errores cometidos el domingo.

Más preocupante sin embargo sería que el equipo hubiese echado de menos más de lo necesario a Machis, ausente por un bolo con su selección. Que el venezolano es fundamental para los nuestros y que se encuentra en un fabuloso momento de juego es innegable, pero que un equipo de nivel como el nuestro, favorito en todas las apuestas de ascenso dependiera tanto de un solo jugador sería una muy mala noticia para el equipo. La plantilla debe de contar con jugadores capaces de reemplazar a otros, con otras características, con otro nivel, pero capaces de hacer ver que ningún jugador es imprescindible, por muy importante que sea.

No queda otra que volver a la senda anterior e ir a León a ganar el partido, porque sería muy importante tras el resbalón sufrido, y porqué se debe y se puede ganar en cualquier campo, tal y como ya nos lo han demostrado con anterioridad. Faltará Montoro, pero el que entre en su lugar deberá de demostrar que está en este equipo por su nivel y calidad.

Por otro lado, empate del filial en un partido muy trabajado, que le sirve para seguir sumando y estar cerca de los puestos de promoción, lo cual no es quizás el objetivo fundamental, pero que seguro les servirá para mantener la ilusión y sobre todo la tensión necesaria.

En cuanto al baloncesto, podríamos decir que estamos en una pequeña crisis. Para un equipo como el nuestro perder dos partidos seguidos no es normal. Se atisban dos grandes problemas a solucionar. Uno de ellos no es nuevo, y es la falta de contundencia de nuestros interiores. A pesar del buen partido de Ferrán Torrres nuestros interiores no asustan a nadie, al menos de momento. Otro problema está siendo las numerosas pérdidas de balón, que están siendo una rémora difícil de explicar y que nos está haciendo mucho daño. Hay que ganar el próximo partido, por acabar con esta crisis de resultados y porque jugamos en casa del líder, y una nueva derrota nos alejaría mucho del objetivo, aquí sí, que no es más que el ascenso.    

jlucena@granadaenjuego.com      


 
 
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