AL CONTRAGOLPE
‘Rajada’ de Fabri, ¿reacción del equipo?
Las dudas en torno al rendimiento del Granada CF volvieron a surgir tras la derrota en la última jornada frente a un Rayo Vallecano que aprovechó la mala imagen brindada por los granadinos en su propio feudo para llevarse de vuelta a Vallecas más que tres puntos.
Y es que las estadísticas muestran que los rojiblancos compiten frente a los equipos grandes pero no dan la talla cuando se enfrentan a los clubes de su ‘liga’. Contrastan las victorias cosechadas en el Sánchez Pizjuán o en San Mamés con los doce puntos que se han dejado escapar en Los Cármenes ante rivales directos, consecuencia de dos derrotas frente al Betis y Rayo Vallecano y tres empates frente Osasuna, Racing y Mallorca. Tampoco en los partidos a domicilio han sumado los de Fabri cuando han visitado a rivales de la zona baja. Así lo refleja el hecho de no haber sacado ni un solo punto ante Real Sociedad, Sporting o Getafe.
La situación no ha pasado desapercibida en la ciudad de la Alhambra y la preocupación por dejar escapar tantos puntos ante rivales directos ya es una realidad. Solo las grandes gestas materializadas ante Sevilla y Athletic de Bilbao permiten de momento a los nazaríes mantenerse fuera de los puestos de descenso. Dos victorias que otorgan dos jornadas de gloria, dos victorias para premiar a la afición, pero en cualquier caso dos victorias fuera de la ‘liga’ del Granada. La verdadera salvación se juega en otros campos, el primero Los Cármenes, y ante otros equipos. Ahí es donde hay que mostrar cierta regularidad.
La última derrota ante el conjunto de Vallecas dejó un ambiente enrarecido, sobre todo por la imagen que dio un equipo que en muchos tramos del encuentro se vio claramente superado por otro recién ascendido como es el Rayo. El técnico rojiblanco, Fabri González, lo enturbió aún más si cabe cargando contra el trabajo semanal que realizan sus futbolistas, denunciando falta de motivación y profesionalidad. Duras palabras las del gallego, quizá fruto del nerviosismo y enfado del momento. Pero tal vez el bueno de Fabri no se paró a pensar que el responsable de que no suceda aquello cuanto denunció es el propio entrenador, o el ‘director de la película’, como él mismo mencionaba en su comparecencia.
Este mar de dudas llega justo en el peor momento, cuando el Granada encara la cuesta final del mes de enero con dos partidos consecutivos a domicilio y en dos estadio cuanto menos difíciles: Cornellá y el Benito Villamarín.
No es la primera vez que unas declaraciones del míster sirven para hacer reaccionar al equipo. Ya sucedió la temporada pasada tras la derrota en liga en Albacete, cuando el enfado en rueda de prensa del gallego se tradujo en una inyección de motivación que permitió cambiar la dinámica y terminar consiguiendo el ascenso.
Los jugadores y el propio Fabri, porque los resultados son cosas de todos, tendrán ahora dos pruebas de fuego en dos atractivos escenarios para dar la talla y demostrarle a la inseparable afición de Granada que quieren consolidar a este equipo en Primera División.
