Once Inicial
Pretemporadas fallidas
Estamos en Diciembre, pero desde hace ya semanas, diría yo que dese antes del comienzo de la temporada, éramos conscientes que tanto las plantillas conformadas en fútbol y baloncesto no parecían estar construidas para el cumplimiento de los objetivos, la lucha por el ascenso y la salvación de una forma holgada en uno y otro caso.
La mala gestión en el fútbol a nivel económico, social y deportivo es evidente. En cuanto al tema deportivo, mi opinión es que gracias a Pacheta, y a la falta de liquidez para cesarle en su momento, el equipo está en una mejor situación, si no clasificatoria si de juego y de sensaciones de la que se preveía.
Hablando de la parcela deportiva, la confección de la plantilla ha sido deficiente, pero supeditada a una situación también caótica devenida de actuaciones pasadas como fue el confiar en una plantilla muy cara en la que solamente valía el ascenso. No había otra opción, y al no darse el ascenso, las arcas entiendo estaban vacías.
Por ello, se tenía que vender, pero hasta el último momento no salió Boye, que entiendo salió por un precio menor que el deseado, y Hongla, que sigue en el equipo al igual que esos maniquís que se utilizan en los entrenamientos a modo de barrera.
Pacheta ha trabajado con lo poco que tenía, y gracias al trabajo a su trabajo y al de los jugadores, seguimos cerca del precipicio, pero con buenas sensaciones, en ocasiones como frente al Ceuta, con muy buenas. Hay jugadores rindiendo por encima de lo esperado, otros al nivel esperado y otros por debajo, es decir, como todas las plantillas de la categoría, pero es verdad que es una plantilla corta, muy corta, que necesita que todos sus jugadores estén enchufados, y esto es lo que no ha pasado hasta ahora. Algunos como Loic Williams o Arnaiz ya han llegado para alegría del técnico, pero otros como Luka Gagnidze, Manu Trigueros, Sergio Rodelas y sobre todo Pablo Sáenz siguen sin dar el nivel exigido por el técnico.
Esperemos la venta de Hongla, cada día más difícil por su nula participación, y le den a Pacheta dos o tres jugadores más que mejoren la competitividad del grupo.
El caso del baloncesto, como siempre, es diferente. A la realidad de ser el equipo con el presupuesto más bajo de la categoría, o uno de los dos más bajos, se une el verano tan convulso vivido ya que no se sabía la categoría en la que saldría el equipo. En este caso los propietarios no hacen una mala gestión como en el fútbol, hacen una excelente gestión en base a los recursos que tienen.
Si todas las plantillas de la liga ACB tienen deficiencias, imaginen la nuestra, y ya desde el principio se vio, que a este equipo le faltaba ese “combo” capaz de jugar tanto de base como de escolta, ese jugón mete puntos a base de tiro exterior y de penetraciones, un manejador que se crea sus propios tiros a semejanza de los que hay en el resto de los equipos, de todos, de los grandes y de los menos grandes.
Pero, además, un balance de 1-8 como el actual tiene otras explicaciones. Yo, en verano ya tenía dudas, y me parecía algo exagerado el optimismo alrededor del equipo, optimismo que hoy en día se ha transformado en preocupación.
Se aposto por jugadores llamados a ser importantes como Speight y Munnings que de momento no han funcionado, el primero de ellos ya fuera del equipo. Se ficharon dos extracomunitarios llamados a ser la referencia de un equipo modesto, y ni Matt Thomas ni Zach Hankins, han estado a la altura de lo necesario. Luego hay tres jugadores que no han contado prácticamente nada como Edu Duran, Iván Aurrecoechea y Pere Tomás. Si además Burjanadze no esta rindiendo como se esperaba, nos quedan únicamente ¡cinco jugadores¡, a saber, Bozic, Rousselle, Olumuyiwa, Valtonen y Kljajic que están rindiendo al nivel esperado.
Pero, además, dos de estos cinco jugadores que estaban rindiendo, se lesionan y de gravedad, Valtonen y Kljajic, lo cual ha desencadenado una serie de movimientos que sinceramente no sé dónde nos llevará, espero que a buen puerto.
Hace ya semanas vino Lluis Costa por Speight, cambio a todas las luces positivo, pero en los días posteriores a ambas lesiones, han salido del Club Iván Aurrecoechea y en el día de hoy Zach Hankins, y han entrado el alero William Howard y Amida Brimah. Con todo esto, y contando con las lesiones de larga duración mi opinión es que necesitamos como el comer ese “combo” que no tenemos, hay que esperar y desear la mejora de Munnings, entiendo que Brimah mejorará el rendimiento de Iván, y no me parece tan mala noticia la marcha de Hankins, que insisto no ha rendido lo esperado, y que dejará un dinero para contratar otro jugador para la zona, donde esta vez no quedará otra que acertar.
