Once Inicial

Se esperaba algo diferente

Jaime Lucena  |  11 de octubre de 2022  |  jlucena@granadaenjuego.com
Jaime Lucena (GRJ)
Jaime Lucena (GRJ)

Que la Segunda División es muy difícil y complicada era ya algo sabido, que al líder Alavés, todo fiabilidad, le meta un repaso el Burgos de tres goles es normal, que el favorito Las Palmas se deje remontar 2 goles en el descuento por el Mirandés es normal, que el Málaga o el Leganés, llamados a estar entre los equipos de arriba estén en posiciones de descenso, no es tan normal, pero da idea de las dificultades de esta categoría. Que nuestro Granada este fuera de los puestos de play off, pues no es lo que esperábamos, pero es así.

Lo que yo realmente no esperaba, más allá de la clasificación, es el juego, mejor dicho, el no juego de los nuestros en estas jornadas que llevamos. La derrota en Andorra la vi como un accidente, tuvimos ocasiones de sobra para que dicho resultado fuera diferente.  El meneo del Eibar, hasta me pareció lógico, campo maldito, un rival enchufadísimo y nosotros todo lo contrario. La derrota en Las Palmas me preocupó, ya que pude ver a un equipo pobre e inferior al rival, un equipo sin criterio con la pelota, sin crear ocasiones, y tras el partido frente al Huesca, la preocupación fue máxima, jugando a nada, mejor dicho, jugando a todo lo que este equipo no debe jugar, sin un patrón de juego, sin orden ni plan.

Bajo mi punto de vista, los males del equipo hasta ese momento han sido los siguientes. Una acumulación de bajas que hace que la defensa, sobre todo, este jugando sin zurdos, ni en la posición de central ni sobre todo en la de lateral. Esto es un hándicap, es evidente. Pero las lesiones no solamente se han cebado en la parcela defensiva, han afectado a otras posiciones en jugadores como Soro o Melendo, en principio los llamados por Karanka a ser los media puntas titulares. Eso es cierto, pero que tu equipo sea incapaz de generar ocasiones, incapaz de trenzar jugadas, incapaz de generar peligro a través de posesiones del balón en el centro del campo no se explica por la baja de este o de aquel. Que el equipo juegue sin un 9 definido, poniendo en esa posición a un Callejón que casi nunca ha jugado ahí, y donde es sabido que su rendimiento por el cual ha sido conocido internacionalmente se ha materializado por jugar de interior es poco comprensible. Pero aceptando el hecho de que Karanka le quiera como 9, tu juego no puede estar basado en el pelotazo para que ese 9 no 9 controle el balón, la baje, y espere a sus compañeros. Que recién aterrizado juegue Perea en lugar de otros compañeros que como se pudo comprobar estaban más preparados, me intranquilizó igualmente. La renovación de Karanka me pareció el primer acierto a la hora de formar la plantilla, pero su obstinación en el error me ha inquietado y sorprendido.

 

Se hablaba de que el partido frente a la Ponferradina podía suponer el cese del técnico. A mí me parece muy prematuro, y más cuando los argumentos son la comparación con Diego Martínez, que pesadez!!! Por otro lado, era cierto que el equipo y el propio técnico debían de varias sensaciones de los últimos partidos, y lo hicieron, sin ganar, pero lo hicieron. Para empezar el equipo jugó con un 9, Jorge Molina, y vaya que sí lo noto. La pena fue que ni Callejón ni Puertas anduvieron finos, que llevan un tiempo que no lo están. La otra variación fue la entrada de Melendo, jugador que le da otra dimensión al centro del campo, donde se mueve el balón con criterio, donde éste no quema, y donde el tocar y tocar con un objetivo, el llegar a puerta contraria, se convierte en una realidad. El equipo fue otro, más reconocible sin duda, y la pena es que aquello que se creía que nunca sería un problema, el gol, lo está siendo, y grave. Parece que aquí no marca nadie más que Uzuni, y este ha venido de su país lejos de su mejor versión.

El equipo con Melendo parece otro, pero tampoco me parece bien que la suerte del mismo se ponga única y exclusivamente en el juego de un solo jugador. El técnico tiene mucho donde elegir, y que no esté Melendo no puede ser la explicación a que el equipo no juegue a nada.  Ahora viene una semana muy importante con dos partidos, pero no asusta, hay jugadores suficientes para afrontar ambos compromisos con total garantías. Si los lesionados poco a poco se van recuperando, y el técnico comprueba que jugadores como Rochina, Bryan , Jorge Molina, Arezo, Meseguer o incluso Perea son de plenas garantías, la amplitud y calidad de la plantilla será un hecho. Si solo es Melendo, mal trabajo el de la Dirección Deportiva en verano.

Y en el baloncesto también esperábamos otra cosa, pero a peor. Después de una pretemporada muy complicada algunos pensábamos que los nuestros no estaban preparados para comenzar con garantías la liga. Como me alegro de no tener ni idea de esto. Se ha ganado en Fuenlabrada y en Murcia, y se perdió en casa frente a Manresa un partido que se tuvo ganado, pero sobre todo, con una excelente imagen en todos los partidos, compitiendo de tú a tú frente a equipos con solera en la competición, y con margen de mejora, mucho margen de mejora.

Es un orgullo verlos jugar, y es un orgullo ver como durante muchos minutos el técnico Pablo Pin (increíble su trabajo, para enmarcar) utiliza quintetos compuestos por jugadores que el año pasado están en LEB, y es que ver lo que están haciendo estos, junto con las incorporaciones que parecen adaptados e implicados en el club, nos hace plenamente felices.

Cuando se inició la temporada, mi objetivo era poder verlos competir frente a todos. Si además de hacerlo, ganan, lo dicho, el orgullo de poder verlos frente al televisor es enorme. Y ya, si ves a jugadores como Lluis Costa, Christian Díaz, Thomas Bropleh y Petit Niang dominando a sus rivales, pues eso, una enorme alegría por ellos y por los seguidores del Club.

 
 
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