OPINIÓN: Noventa minutos para la gloria, por Antonio Lasso
No se puede narrar con palabras la emoción y la alegría que tuvimos el pasado domingo cuando Ighalo, primero y después Ivan Amaya marcaron los goles que pueden hacer el milagro del ascenso del Granada a Segunda División. Los que tuvimos la suerte de asistir a este encuentro al que fuimos con todas las precauciones a recibir al equipo que había prácticamente avasallado al Real Madrid en el torneo de Copa, este resultado nos ha compensado de todos los años que llevamos de penurias en categorías que el Granada nunca ha merecido.
Las sensaciones que sentimos en este encuentro nos recordaron las del último ascenso ante el Guadalajara. Siempre he dicho que los que ya tenemos unos años y hemos tenido la suerte de estar presente en los ascensos de nuestro primer equipo no estamos ya para perdernos ningún acontecimiento que pueda resultar trascendente. Se positivamente que los precios fijados por la Gestora eran bastante elevados para lo que estábamos acostumbrados. El ser un partido televisado por dos cadenas que lo anunciaron a mi juicio con bastante antelación y la crisis que padecemos, hacia presagiar que el lleno no se produciría y que el aspecto que presentó el campo de Los Cármenes en los partidos decisivos, tanto contra el Murcia el dichoso 25 de junio de 2000 como el día del Guadalajara otro 25 de Junio pero del 2007 era difícil de igualar.
Lamento de veras que estos condicionantes no llevaran al campo a muchas personas, incluso socios, que vieron el partido por la tele pero que no tiene comparación con vivir este trascendental partido en el campo. Yo particularmente disfruté al máximo con ver a los espectadores, jóvenes y menos jóvenes provistos de un chisme moderno como es el aplaudidor que había regalado Ideal y ver tanta camiseta del Granada comolucian la mayoria de los espectadores es para quitarse el sombrero el que lo llevara. La emoción que se vive y palpa en el campo no tiene comparación con los saltos de alegria que supongo darían muchos en su casa con los goles.
Con tanta televisión como vemos algunos en nuestras casas nuestras familias están ya hartas de tanto futbol. El estar presente en el campo hace que uno tenga una satisfacción, no de haber quedado bien con el actual presidente, que quizá no ha estado a la altura, sino con uno mismo. Había que hacer un esfuerzo y se hace. Igual digo para los que viajan a Madrid a ver si por fin se consolida el añorado ascenso. Los aficionados tienen que hacer otro esfuerzo económico que creo merece la pena, si por fin logramos la meta.
Quedan noventa minutos para lograr lo que llevamos soñando muchísimos años. Exactamente desde el descenso en la temporada 87/88 estamos esperando este momento. No lo dejemos pasar que estos históricos momentos lo recordaran algunos con mucho agrado y con el tiempo se lo contarán a sus hijos y nietos como nos pasa a más de uno.
La principal novedad de la nueva temporada será que la tercera plaza de ascenso se decidirá en un playoff
El conjunto rojiblanco ha confirmado los tres primeros amistosos del verano
