OPINIÓN: Cautelosa ilusión, por Alberto Bueno
Empiezo a tener miedo, emoción, tensión y expectación. Y no sé cuántas cosas más. Todas a partes iguales, cada una en su justa dosis y en su particular momento. Esto pintaba bastos. Feo, feo aparecía el asunto. Y, de repente, se pone la cuestión interesante y comenzamos a salir de esa desesperanzada apatía.
A seis puntos del cuarto clasificado. Seis. Vale, de acuerdo, con media Mancha y parte de Andalucía metida en medio. Pero a seis. Y es en lo que me fijo. Esta noche nos visita el Marbella; sí, sí, el cuarto clasificado, el mismo. Toma partido. Viniendo de conquistar 'El Carranza' nosotros, de ganarle al Lucena ellos. A priori, debería ser el choque nuestro, pero hablar de fútbol y Granada es hablar de incertidumbre. Estamos experimentando demasiados cambios en muy poco tiempo. A mí estos cambios me están recargando las pilas de ilusión. No quiero que se desborde, curarme en salud, que ya ha habido demasiados palos; sin embargo, ahí está, que algo es algo. Para empezar, ilusión por quienes han cogido las riendas del club. Me parecen gente seria y de confianza, henchidos de granadinismo del 'de tó la vida' y eso es bueno. Por lo pronto, el beneficio de la duda y la confianza se la merecen. Para seguir, por la afición.
El Granada Club de Fútbol ha visto -una vez más- que cuenta con una guardia de honor, pretoriana, que evitará a toda costa su desaparición mientras pueda pasar por sus manos la salvación. Muestra de generosidad y entrega para, con el equipo de sus amores; actitud que ya empieza a ser reconocida y conocida en muchos lugares de la geografía española. Y, para acabar, por los jugadores. Aires nuevos soplarán cuando se ve tal cambio de actitud en los 'chavales' de Braojos. Los rojiblancos son uno de los mejores equipos del grupo en su segunda vuelta y eso se nota. Se palpa que hay ganas de morder y hacer daño, de levantar de nuevo el pabellón que tan bajo había caído y demostrar que, ante todo, son profesionales y saben hacer su trabajo. Mérito ha tenido su actitud tras tantos meses sin ver ni un euro.
No sé, no sé. Según el día y así me levante, veo la temporada con optimismo y posibilidades de, al menos, disputar la liguilla de ascenso o con un 'capeemos el temporal, cerremos la temporada y vamos a empezar otra vez'. Son sentimientos antagónicos, pero que surgen solos, ya digo. El partido de esta noche se me antoja como esas grandes noches de fútbol europeo, con el Barça o el Madrid haciendo de las suyas ante las potencias inglesas o italianas; salvando las distancias, claro está. Si se gana el partido contra el Marbella y los restantes resultados nos son favorables, habría motivos para el optimismo. Con que la promoción sirviese de acicate para ingresar unos cuantos euros a las muy maltrechas arcas del club me daría por satifescho.
Ya veremos.
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El entrenador del Atlético Monachil ha señalado que su equipo "han hecho un buen papel" está temporada